Un campillero en la Academia Hispanoamericana de Buenas Letras

El poeta, novelista, dramaturgo, crítico y profesor de la Universidad de Málaga Francisco Morales Lomas ingresa en la prestigiosa institución

"Es un honor poder formar parte de esta gran familia de la literatura que es la Academia Hispanoamericana de Buenas Letras que ha tenido a bien elegirme por unanimidad como académico de número para ocupar el sillón de Ramiro de Maeztu".

Así de contento despide el año el poeta, novelista, dramaturgo, escritor, crítico, profesor universitario y, por cuarta vez ya, académico natural de Campillo de Arenas Francisco Morales Lomas, a cuenta de su ingreso en la prestigiosa institución. 

Morales, afincado en Málaga desde hace décadas, llega a la entidad en la última tanda de incorporaciones, que ha tirado de intelectuales de España, Colombia, Argentina y Jordania para que formen parte de su plantel, como informan desde la academia. 

La Academia Hispanoamericana de Buenas Letras es una asociación de investigadores y profesores de Filología, Lingüística y Teoría de la literatura y de creadores literarios en lengua española. Se trata de la primera academia que, en consonancia con los avances en materia de comunicación y globalización de hoy día, funciona en forma virtual. Su sede es todo el territorio de habla hispana.

Entre sus actividades, la institución auspicia publicaciones, encuentros, seminarios y otras vinculadas a las letras y forma parte a través de sus miembros de jurados internacionales, como los que dictaminan los Premios Hespérides y los Ángel Ganivet, entre otros.

Nacido en 1960, el campillero preside actualmente la Asociación Andaluza de Escritores y Críticos Literarios, la Asociación Internacional Humanismo Solidario y vicepreside la Asociación Colegial de Escritores de España en Andalucía y la Asociación Andaluza de Dramaturgos, Investigadores y Críticos Teatrales.

Catedrático de Lengua Castellana y Literatura de Bachillerato y profesor titular de la Universidad malagueña, es doctor en Filología Hispánica, licenciado en Derecho y en Filosofía y Letras: "Muy agradecido a todos y todas los que lo han hecho posible. Todo ello me lleva a trabajar con más energía si cabe por la literatura, mi pasión y mi vida", concluye.