El agua de Coto Ríos es declarada no apta para el consumo
El Ayuntamiento de Santiago-Pontones confirma que los análisis prohiben beber, cocinar o lavar alimentos con el agua
El agua de abastecimiento público ubicada en la presilla de Coto Ríos (Santiago-Pontones) ha sido declarada no apta para el consumo humano tras los últimos análisis realizados.
Tal y como confirma el Ayuntamiento de Santiago-Pontones, el uso del agua queda prohibido para beber, cocinar, lavar, alimentos o cualquier uso doméstico que implique contacto directo con otra personas.
"Rogamos a los vecinos que se abstengan de utilizar el agua de la red de suministro para dichos fines hasta nuevo aviso", señala el alcalde Antonio Rodríguez en un bando difundido por el Ayuntamiento en redes sociales.
La medida afecta a una población que ronda los 300 habitantes y es de carácter preventivo, hasta que los nuevos análisis garanticen la potabilidad del agua. "Comunicaremos los resultados a través de los canales oficiales", señala García, y subraya que el corte del suministro proveniente de la presilla es una realidad.
INDIGNACIÓN EN LAS REDES
Aun cuando el Ayuntamiento pide "comprensión y colaboración" a los ciudadanos, las redes vuelven a ser escenario de críticas por la gestión del caso.
Al pie del bando publicado por el equipo de Gobierno abundan los comentarios de hastío por parte de usuarios de Facebook. "A saber el tiempo que llevamos haciendo uso de el agua contaminada", desliza una ciudadana.
La medida estará vigente hasta que los análisis confirmen que el agua vuelve a tener un uso cotidiano para los habitantes de la aldea, situada en pleno corazón del Parque Natural de la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas, cerca de la cola del embalse del Tranco de Beas, y una de las zonas de mayor atractivo, pues se encuentran en sus proximidades la piscifactoría, la Torre del Vinagre y el Jardín Botánico.
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