Antonio Pérez, entre el Fortnite y las mancuernas

La perla del Jaén Paraíso Interior, recientemente nominado como mejor jugador joven de fútbol sala, combina los apuntes de Derecho, la Play y la preparación deportiva en casa

Los deportistas no están de vacaciones por más que la competición haya bajado la persiana hasta nueva orden. Que se lo pregunten a Antonio Pérez (Jaén, 2000). El benjamín del Jaén Paraíso Interior distribuye su tiempo para atender todas las obligaciones: el segundo curso de Derecho, la preparación física en casa y, como todo no es trabajo, 'cumple' como usuario del Fortnite.

"Por la mañana estudio los apuntes de la Universidad. Después me pongo un rato con la consola, y hago los ejercicios que nos han mandado desde el club", narra el cierre en conversación con este periódico. Pérez, residente en el Gran Eje, vive en un octavo. Ahora le está sacando provecho a las escaleras. "Tengo un par de mancuernas que compré con mi hermano y además hacemos flexiones", dice.

En medio de la cuarentena, la perla amarilla ha sido nominado como mejor jugador joven de fútbol sala por el portal digital FutsalPlanet Awards. Reconoce que vivió la noticia con emoción. "No me lo esperaba cuando me pasaron fotos al móvil", admite. La sensación ahora, con todo parado, es extraña, más aun cuando por delante quedan las siete jornadas de Liga, el play off (clasificación mediante) y la Copa del Rey. "La temporada se ha parado en el mejor momento", añade. Quedan por delante partidos contra los equipos de arriba —Levante, Osasuna, Inter y Palma— y los de abajo —Córdoba, Santa Coloma y Burela—.

Pérez lleva tres tantos en su primera temporada a como jugador del Jaén FS y está alternando la posición de cierre único con la de cierre/ala cuando coincide en la pista con Piqueras o Mauricio. Sabe que la naturaleza del juego invita a ser polivalente, más aún si tu jefe se llama Dani Rodríguez. "Donde me ponga intento rendir al máximo", expresa un hombre, que, como todos, vive el encierro entre las obligaciones y el tiempo para uno mismo. "Lo llevamos lo mejor que podemos", concluye.