La artesanía y el diseño 'pin up' unen fuerzas en Úbeda

El dibujante Juan Carlos Quesada y los esparteros Jesús y Pedro Antonio Blanco crean De 47 Reales, una apuesta de tradición e innovación que reivindica su carácter ubetense

Úbeda suma a su rico patrimonio cultural un nuevo motivo para visitarla, para disfrutarla. Y, además, de la mano de tres enamorados de su tierra, tres amigos de la infancia que ponen al servicio de su patria chica lo mejor de cada uno: el dibujante Juan Carlos Quesada aporta la calidad de sus diseños (que le han valido situarse entre los mejores en lo suyo) y dos esparteros de dinastía, los hermanos Jesús y Pedro Antonio Blanco, su magisterio artesanal.

Juntos han formado De 47 Reales, la marca comercial que aúna tradición e innovación, siempre con el leit motiv claro y rotundo de su militancia ubetense: "El taller de los hermanos Blanco está en la calle Real, 47, y decidimos llamarla así", aclara Garrido.

En sus palabras, "es un negocio, sí", pero con la peculiaridad de que la emoción, la pertenencia al hermosísimo espacio físico que es la ciudad patrimonial, está muy unida al municipio: "Si llegamos a algún lado el día de mañana, que la marca esté muy asociada a Úbeda; la sangre tira", apostilla el creativo.

El resultado de su sinergia es de lo más sorprendente y tiene en el calzado artesanal su primera apuesta. Sí, en las esparteñas salidas de los talleres de De 47 Reales conviven el talento de tres visionarios que hacen de estas piezas auténticas obras de arte.

"Unimos a la artesanía tradicional del esparto la ilustración pin up", expresa el dibujante ubetense en relación con el movimiento artístico del primer tercio del siglo XX que, poco a poco, conquistó espacios tan dispares como la moda, la televisión o el cine. Garrido, uno de los referentes actuales de este estilo en la provincia, va más allá y adelanta nuevas propuestas creativas: "Vamos a sacar una línea de camisetas más enfocada al verano, también bolsos de estética pin up y complementos como pendientes pintados a mano sobre una base de fibra vegetal, llaveros..., la imaginación al poder", sentencia.

Una forma de llevarse Úbeda puesta, pero con un plus de exclusividad: "No hay nada parecido, sí muchos diseños de zapatillas florales y con motivos decorativos, pero así no, y mucho menos de unos creadores de la tierra", concluye Garrido.