"El ciclismo adaptado me da libertad y fuerza para sentirme persona"
Asdrúbal Garrido tuvo una lesión grave en 2009; tras once operaciones ha encontrado en el deporte un estímulo para seguir adelante
El dolor en el tobillo derecho continúa para Asdrúbal Garrido Fernández (Jaén, 1979), pero atrás quedaron los días oscuros. El jiennense sonríe y recientemente ha logrado dos terceros puestos en el Campeonato andaluz de ciclismo paralímpico, uno en modalidad de ruta y otro en contrarreloj. "El deporte me da fuerza y libertad para sentirme persona", asevera en declaraciones a Lacontradejaén.
Fue en 2009 cuando una esguince desencadenó un calvario para Garrido. Sólo tiene un 1% de movilidad en el tobillo maltrecho con respecto al sano. "Pasé por once operaciones, la última en 2018. Un podólogo de Sevilla me arregló la vida y por fin he dejado de usar el bastón", resume.
En 2020 empezó con el ciclismo y enseguida notó que el vínculo iba para largo. Antes de la lesión había practicado atletismo. "Era mi vía de escape. Yo ahora siento que no soy dependiente. Lo pasé muy mal, con una depresión que sólo me dejaba ver mis limitaciones", recuerda.
"NUESTRO RETO ES LLEGAR A META SIN AÑADIR MÁS DAÑO"
Llegan tiempos mejores, los éxitos deportivos, y el de Jaén se los dedica a su familia por la lealtad cuando él fue presa de la frustración. "Es subirme a la bicicleta y no siento no frío ni calor, aunque siga el dolor crónico. Me cuesta explicarlo", añade.
Mario Vilches, entrenador personal de Garrido, mira al horizonte para decidir la próxima prueba, acabado el calendario en ciclismo adaptado. Toca preparar la próxima temporada y hay que elegir bien qué carrera se adapta a las condiciones de Asdrúbal. "Nuestra filosofía es simple: hay que llegar a la meta sin hacernos más daño del que teníamos cuando empezamos. Así nos quedamos todos contentos", sentencia.
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