Bruno Coelho se gana los focos de Ricardinho en el Europeo
Coelho está especialmente inspirado en el Europeo de fútbol sala
La selección portuguesa pinta de otra forma. En la tarde del lunes confirmó su cuarta presencia en las semifinales de una Eurocopa en las últimas seis ediciones. A los lusos se les presupone entre las favoritas, pero suelen subestimarse a sí mismos y exponer carencias a la hora de la verdad. Les pasó en la penúltima ronda del Mundial de Colombia y en Serbia 2016, cuando cayeron contra España, aun con Ricardinho. Aunque algo ha cambiado.
En Eslovenia parece que el jugador del Movistar Inter no está solo. A sus seis goles en el torneo —lo que le ha valido para consolidarse como el máximo artillero en la historia del torneo, con 21, por delante de los 20 del fallecido Eremenko—, hay que sumarle la consistencia colectiva y la aparición de Pedro Cary (cuatro tantos) y la solidez de Bruno Coelho, este último especialmente inspirado y con gran peso en el conjunto de Jorge Braz, al que ha contribuido con tres aciertos a la red. Y mucha solidez.
Sin duda, uno de los nombres más en forma del combinado ibérico: “Dicen que sí. Mis compañeros, entrenadores y el propio Ricardinho así me lo recuerdan. Me encuentro muy bien, es un Europeo en el que siento que influyo porque tengo al lado a los mejores de Portugal y del mundo. Estoy feliz por dar a la selección y espero continuar así”. El benfiquista cree que, esta vez sí, puede ser una de las mayores oportunidades para que su país levante un título. “Tenemos que mantener los pies en la tierra, no podemos confiarnos con este resultado. Conseguimos la victoria contra una gran selección como Azerbaiyán (8-1) y ahora viene Rusia, donde tenemos que continuar para ser competentes con nuestro trabajo”, aseguró en zona mixta para LaContraDeJaén.
El cambio de Portugal no es consecuencia de los jugadores, puesto que el bloque grueso del mismo apenas ha cambiado merced a las inclusiones de jóvenes como André Coelho o lesiones de Cardinal o Djô para abrirles las puertas a algunos no habituales como Tunha. La mentalidad es clave, perder el miedo, como reafirma el ala: “Ahora mismo queremos ganar y confiamos en ello para lograr nuestro sueño. El equipo confía en lo que hace, competimos muy bien, que es muy importante, y se trata de una selección más unida y homogénea que en otras ediciones, que procura trabajar con responsabilidad y tener consistencia en nuestra labor”.
Respecto a su rival del jueves, la campeona continental en 1999, Rusia, declaró que siempre es “una fuerte candidata a ganar el trofeo”. “Sabemos perfectamente la calidad que tiene con jugadores como Robinho, Chishkala o Eder Lima…nosotros tenemos que estar al máximo de nuestras capacidades para hacerles frente. Esperamos lo mejor de nuestras cualidades para ello. Tenemos nuestros secretos y vamos a intentarlo. Creo que sí podemos hacerlo”, confía Coelho, cuya ilusión ha contagiado a toda una Portugal, dispuesta a ir con el brillo de Ricardinho y con el esfuerzo del resto hasta la gran final.
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