EPIS de La Buena Muerte para luchar contra la pandemia

La hermandad entrega equipos de protección individual, guantes y mascarillas homologados al Complejo jiennense, en solidaridad con los profesionales sanitarios

La Real Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, Cristo Descendido de la Cruz y Nuestra Señora de las Angustias lo tiene claro: "Estamos implicados con el asunto de la falta de material y con la situación de las personas que trabajan en el hospital, y dentro de la caridad de la hermandad hemos decidido invertir en ello dentro de nuestras posibilidades". 

Dicho y hecho: no hay forma de reunirse en junta de gobierno de forma presencial mientras el coronavirus no aleje su amenaza, pero los medios actuales permiten estar conectados a los responsables del colectivo catedralicio y, así, mantener viva la llama cofrade hasta que todo pase. De esta manera, los dirigentes de la hermandad pusieron sobre la mesa su preocupación por la realidad de los centros sanitarios y no lo dudaron, se echaron para adelante: "Decidimos comprar material y entregarlo donde más falta hace", aclara Manuel Rico, hermano mayor de la cofradía.

Los elementos donados al Hospital jiennense incluyen seiscientos EPI, setenta cajas de guantes y trescientas unidades de mascarillas, completamente homologados. Un nutrido lote que, a buen seguro, redundará en la mejora de la prestación sanitaria que ofrece el centro y en la seguridad de los profesionales de la salud. 

Lejos de ensimismarse estos días previos a la Pasión, La Buena Muerte mira hacia afuera. Si su esperada procesión no puede hacer las delicias de la multitud que se desplaza a las calles de la capital cada Miércoles Santo (otra forma de hacer el bien, si se tiene en cuenta la alegría que genera su cortejo entre la población), la hermandad, al menos, trabaja desde la solidaridad también para que la pandemia permita que las puertas del Perdón de la Catedral se abran en 2021 y un largo silencio de admiración reciba al Crucificado de Higueras en la Plaza de Santa María. 

"Esta situación es muy dura, queremos que se acabe lo antes posible y lo que podamos ayudar dentro de lo que se pueda, ahí estaremos", concluye Rico.