Menores fuera de control

Sindicatos exigen soluciones para acabar con los problemas en el centro de menores Carmen de Michelena, mientras los vecinos no esconden su preocupación por la creciente inseguridad

Faustina sube la empinada cuesta de la calle Obispo González con su carrito de la compra. Viene del Mercado de San Francisco y va dirección hacia su casa, en el barrio de La Merced. "Últimamente vemos más Policía, pero seguimos sin estar tranquilos", dice la mujer. Se refiere a los problemas de inseguridad derivados del centro de menores Carmen de Michelena. "Desde el verano todo ha ido a peor. Esto es inadmisible", apunta Manuel, otro vecino de la zona. "Campan a sus anchas", remata. 

En la Plaza de Santa María, cuatro adolescentes, sentados a la sombra de uno de los árboles cercanos al Ayuntamiento, observan cómo un grupo de policías pide la documentación a otros jóvenes en la puerta de la Catedral. Son inmigrantes y han llegado hace poco a Jaén. Responden a las preguntas con monosílabos y prefieren no ser molestados. Tampoco se inmutan ante la presencia de los agentes. Son menores extranjeros no acompañados (los llamados 'menas'), cuya tutela tiene que asumir la Junta y que han desbordado absolutamente los recursos públicos de la comunidad. 

Al centro de menores Carmen de Michalena han llegado en los últimos meses tantos que se han visto obligados a colocar camas hasta en los pasillos. No hay duchas para todos y la cocina no da abasto. Dentro de las instalaciones se han convertido en un problema y fuera de ellas también. Los últimos altercados de la madrugada del jueves, con amenazas y agresiones a policías, han sido la gota que ha colmado la paciencia de los sindicatos.

RECLAMAN SOLUCIONES

Comisiones Obreras reclama soluciones para acabar con los problemas en el centro de protección de menores, después de que policías con material antidisturbio tuviera que intervenir en la madrugada del jueves para reducir a un grupo de ocho menores que habían acorralado al vigilante de seguridad y a los monitores.

En una nota, el sindicato lamenta lo que califican de "triste incidente" y advierte que este episodio no es algo nuevo en este centro, sobre todo "desde el año 2010 por varios factores como el efecto llamada, que hace que se dupliquen los menores que vienen a nuestro país y la falta de inversiones en la protección de los mismos que hacen que falten medios técnicos y humanos". CC OO alerta del "desbordamiento" y exige "respuestas con garantías" para los menores y los profesionales que trabajan diariamente para atender a estas personas, que "se ven incapaces de atender razonablemente a los jóvenes, a pesar de su desvelo y su voluntad, debido a la enorme sobrecarga de trabajo y el estrés al que se ven ocasiones sometidos".

ESTÁ A MÁS DEL DOBLE DE SU CAPACIDAD

Añade que en el caso del centro Carmen de Michelena, la situación se ha vuelto "insostenible", ya que "en ocasiones han sufrido algo más del doble de la capacidad del edificio, que son 21", lo que conlleva "un hacinamiento que acelera los casos de agresividad, por ser imposible separar espacios para los distintos perfiles de menores, que por su dura trayectoria vital, hace necesaria una atención muy especializada que actualmente no se les está prestando de forma adecuada". CCOO ha criticado la "escasez" de profesionales que está llevando a la plantilla "al agotamiento extremo, tanto física como psíquicamente".

A esto, el sindicato le une "la falta de cobertura de vacantes" en centros de menores y en residencias de mayores de la provincia, dependientes de la Delegación de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía. 

NO SON HECHOS AISLADOS

Insisten en que lo ocurrido en el Carmen de Michelena, que se saldó con la detención de un menor, "no es puntual, sino todo lo contrario", por lo que insisten en la necesidad de adoptar soluciones "ante la falta de coordinación y previsión de la administración andaluza". Es este punto, plantean la necesidad de "un plan específico inmediato" con dos medidas "fundamentales", por un lado la contratación de más personal y nuevos centros donde "se traten de una manera especializada los distintos perfiles de los menores".

CSIF también denuncia la "masificación" y "sobreocupación" de este centro de la capital, que tiene 21 plazas pero que ha llegado a albergar con los mismos recursos hasta 44 menores, lo que lleva a sobresaltos habituales en la convivencia.

LOS VECINOS PIDEN SU TRASLADO

La Asociación de Vecinos 'Unidos por la Merced' considera que el Centro de Protección de Menores Carmen de Michelena no está en el lugar "más idóneo". El colectivo lo ha vuelto a hacer público y así se lo ha comunicado a la Junta en más de una ocasión. Consideran que solo genera inseguridad y un impacto negativo para el turismo en el casco histórico.