Rescate de una cigüeña blanca amputada

Un 20% de la población de cigüeña blanca en Jaén sufre bajas por heridas y amputaciones por ataduras con cuerdas y plásticos que los adultos utilizan para "forrar" el nido

Los nidos de cigüeña blanca de la provincia de Jaén son seguidos de forma periódica por voluntarios del GAC Erithacus Sur y el colectivo Siece. Según informa el colectivo, hace unos días, en el nido de Carboneros, comprobaron que el comportamiento del pollo no era habitual en un individuo de su edad. Presentaba dificultad para levantarse y el tamaño no era el esperado. Inmediatamente se puso en marcha el Grupo Voluntario de Rescate que, ayer, confirmó lo que ya se temían. El pollo se encontraba atado y había perdido una pata a la altura de la tibia, que le impedía ponerse de pie. Por lo tanto, tenía serias dificultades para sobrevivir en la naturaleza.

El rescate fue realizado por parte del Grupo de Anillamiento Científico Erithacus Sur, con la colaboración de los Bomberos de La Carolina y la Sociedad Ibérica para el Estudio y Conservación de los Ecosistemas (SIECE). El único pollo de este nido fue derivado al Centro de Recuperación de Especies Amenazadas del Quiebrajano.

Desde la Sociedad Ibérica para el Estudio y Conservación de los Ecosistemas se denuncia que, otro año más, las cigüeñas de la provincia de Jaén sufren "los perjuicios de la inconsciencia humana". Según los datos facilitados, cada año, alrededor del 20% de la población de cigüeña blanca en Jaén sufre baja por heridas y amputaciones por ataduras con cuerdas y plásticos que los adultos utilizan para "forrar" el nido.

A ojos de la organización, la solución pasa por algo "tan sencillo" como recoger las cuerdas de las pacas de paja y cualquier residuo generado de la actividad ganadera o agrícola cuando se termina la labor diaria en el campo. De esta manera, se evitaría la muerte de decenas de aves, que además, contribuyen de forma positiva controlando la población de insectos u otras especies no beneficiosas para los cultivos.