¿Cómo convivir con el polen?

Los distintos tipos de pólenes se mantienen en niveles similares a finales de la semana pasada, excepto el del plantago que pasa del medio al alto

Ojos hinchados, enrojecidos, ahogo, mucosidad, estornudos... Un 30% de la población jiennense sufre alergia y la primavera se convierte en un auténtico calvario para ellos. Se estima que en unos años, esta cifra alcance el 50, por los que todos los expertos y profesionales del sector se afanan en asesorar y ayudar a la población. En estos momentos, según informa el Complejo Hospitalario, los distintos tipos de pólenes se mantienen en niveles similares a finales de la semana pasada. La excepción es el del plantago, que pasa del medio al alto.

¿Cómo convivir con el polen? El Colegio de Farmacéuticos de Jaén ofrece algunas pautas. Las principales, evitar las actividades al aire libre durante los días secos y calurosos, así como antes y después de la lluvia, cuando la concentración del polen en el aire es mayor. Recomienda ventilar la casa a primera hora de la mañana y a última hora de la tarde, ya que el recuento polínico en esos momentos del día es menor. Además, es conveniente disminuir las actividades al aire libre entre las 5 y las 10 horas de la mañana y las 19 y las 22 horas de la tarde.

Entre los consejos, mantener cerradas las ventanillas en los viajes en coche y usar filtros para pólenes, no secar la ropa en el exterior los días de recuento de polen altos, y en días de viento, utilizar gafas de sol al salir a la calle.

El Colegio de Farmacéuticos de Jaén ha puesto en marcha una campaña informativa entre sus oficinas de farmacia para que los jiennenses sepan identificar los síntomas de alergia al polen y aprendan a tomar medidas para combatir esta patología que, según la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales en Jaén, afecta al 30% de los jiennenses.

Desde la institución colegial inciden en que se trata del tipo de alergia más frecuente en España, causada por la reacción anormal del organismo al polvo fino procedente de las flores y las plantas, como las gramíneas, el ciprés o el plátano de sombra, con especial incidencia en la provincia de Jaén del polen del olivo, por la alta concentración de este cultivo en el campo jiennense.