La fuerza de 'Pídeme la Luna' en sus días más difíciles

La asociación pierde a dos chicos de 16 y 19 años en tres días; la presidenta Marisol Escribano recuerda la vitalidad y el coraje de los fallecidos

Adrián y Pedro ya no están con el resto de menores oncológicos cuidados en la tercera planta del Maternal. Adrián tenía 16 años y murió el pasado viernes. Llevaba desde los nueve con 'Pídeme la Luna'. Pedro perdió la vida el domingo con 19 años; estaba con el colectivo desde hacía cuatro. En tres días la asociación ha vivido un calvario. "Estamos consternados", admite Marisol Escribano, la presidenta.

Escribano ha afrontado la pérdida en sintonía con el legado de los chicos que se han ido y de los que luchan cada día: coraje, valor y mentón hacia arriba. La carta que dedicó al pequeño Adrián, de Alcaudete, ha conmocionado a los lectores y ha tenido un alcance notable en las redes sociales. "Ni siquiera sabía que se había leído tanto", admite ella en conversación con este periódico. Sobre Adrián sólo tiene palabras a la altura de alguien muy maduro: "Era un luchador nato. Jamás se cansó. Aceptó todas las pruebas y nunca perdió la sonrisa", describe a un chico que sacaba "notas estupendas".

De Pedro dice que era la persona más optimista del mundo. El chico, según cuenta, tenía la habilidad de reírse de todo. "Su sentido del humor era envidiable", admite Escribano, quien aún no puede creer que los dos se hayan ido de golpe. "Es la primera vez que vivimos un doble palo así, tan seguido", reconoce.

CUMPLIR LOS SUEÑOS, EL DESAFÍO DE 'PÍDEME LA LUNA'

Pedro pudo cumplir dos de sus sueños gracias a 'Pídeme La Luna'. Estaba loco por conocer a José Mota, y este le abrió las puertas de su estudio en Madrid para que conociera los entresijos de la televisión. Después, Mota fue al hospital jiennense en dos ocasiones para visitar al chico. El otro sueño del recientemente fallecido era ver en directo el Campeonato de Lucha Libre que se celebró en el Palacio de Deportes José María Martín Carpena de Málaga. El alcalde local, Francisco de la Torre, propició los deseos de Pedro. "Disfrutó mucho con los combates; yo en cambio no hacía más que taparme los ojos", recuerda Escribano.

En la razón de ser de 'Pídeme la Luna' está cumplir los sueños de los menores a los que da cobertura. "Unos lo hacen dentro del hospital, y los que están mejor, fuera", remarca. Viajes a Sierra Nevada para esquiar, a Disneylandia y al musical del Rey León son parte de la oferta que consigue el colectivo con esfuerzo.

Marisol Escribano ha escrito el cuento bilingüe El aguila y el gorrión. El objetivo es lograr fondos, imprescindibles dada la ausencia de apoyo económico de las administraciones. Hay eventos por delante en la misma línea: una gala en Úbeda el sábado que viene y un musical que llegará al Teatro Darymelia en junio. Todo en aras de ellos, niños con alma de héroes.