Elipsis Rajoy

La moción de censura, histórica porque motivó el cambio de Gobierno, dejó durante horas al presidente Rajoy literalmente fuera de escena

“¿Dónde está el presidente?” Hasta compañeros de filas del PP admitían desconcertados que no sabían dónde estaba el presidente Mariano Rajoy cuando la mayoría del Parlamento ya se había puesto de acuerdo para mandarlo a la oposición. Rajoy desapareció del escaño, no estaba junto a Soraya Sáenz de Santamaría y su ausencia acumulaba horas y desasosiego; sobrevino el estrés narrativo. Rajoy se había esfumado.  La carga dramática del momento aumentó en televisión porque el protagonista, el hombre que luchaba por agotar la legislatura que había conseguido en las urnas, decidió ausentarse de la Cámara. ¿Dónde estaba? Manuel Jabois, uno de los cronistas que mejor interpreta la vida política española, dio su opinión en directo a través de la televisión de El País: “Todo tiene una carga literaria muy fuerte. Al final, Rajoy ha hecho lo que cualquiera haría cuando se desploma: irse al bar a beber y fumar con los amigos”. Las informaciones apuntaban a que Mariano Rajoy pasaba sus últimas momentos como presidente rodeado de gente de su confianza en un restaurante. La moción avanzaba con la seguridad matemática de que había llegado el fin del líder conservador al frente del Gobierno. Y él no estaba para escuchar las intervenciones de los diferentes portavoces parlamentarios. Hasta el propio Pedro Sánchez mencionó el nombre del ausente sin saber hacia dónde mirar, ya sabiéndose su relevo.   Rajoy tenía que volver. Y lo hizo como pudo: aguantó el tipo, dejó que las cámaras lo enfocaran de una vez por todas y fue el primero en felicitar al séptimo presidente de la democracia española. El líder del PP remarcó en el adiós que dejaba España mejor de cómo la encontró cuando accedió al cargo. Gallego, democristiano y político de trayectoria basta, se despedía de la presidencia protagonizando un momento televiso de impacto. Qué elipsis.