"Mi poesía reivindica los derechos sexuales y reproductivos de la mujer"
Lacontradejaén cruza el Charco (aunque solo sea telefónicamente) para conversar con la poeta Fanny Campos Espinoza (Santiago de Chile, 1980), flamante ganadora del I Concurso de Poesía Feminista Paca Aguirre, convocado por la Universidad Popular Municipal de Jaén. Silenciosa y delicada en su conversación, la escritora regala una risa prudente más o menos cada dos respuestas desde Concón, en la nerudiana región de Valparaíso.
Mater-Nación es el título del libro con el que Campos ha internacionalizado la edición príncipe de este certamen literario cuya naturaleza feminista la atrajo desde que supo de su existencia. Activista y hondamente comprometida con la causa, asegura que estaría encantada de poder venir a Jaén a recoger su galardón.
—¿Qué se le pasa a una poeta por la cabeza cuando le comunican que se ha convertido en la primera ganadora de un premio recién nacido, que lleva por bandera temática su propia lucha y que, además, se convoca nada más y nada menos que a más de 10.500 kilómetros de distancia?
—Gratitud, me alegra que me reconozcan un trabajo que estaba escribiendo y reescribiendo intermitentemente desde hacía tiempo ya.
—¿Es su primer reconocimiento en España?
—Sí, y la primera vez que recibo un reconocimiento en otro país, así que lo recibo con mucha gratitud; me honra, porque en el fondo puedo llegar a otro público distinto, y eso se agradece siempre.
—Usted es una activista confesa por la causa de la igualdad entre mujeres y hombres. ¿Fue, precisamente, el carácter feminista de este concurso lo que la animó a concurrir, o las temáticas le son indiferentes?
—Sí, eso fue; de hecho, este poemario no había tenido muy buena recepción en otros concursos, justamente por el tema político, porque es una poesía política: me imagino que sería por eso, aunque es especular. Me llamó la atención que fuera un concurso feminista y pensé que ahí podía tener su cauce este proyecto literario.
—En su trayectoria vital, Fanny, la lucha contra el abuso del poder y las desigualdades entre mujeres y hombres son una constante. ¿Estos son, también, los argumentos poéticos de Mater-Nación, el libro premiado?
—Sí, básicamente el tema de la reinvindicación de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y de los cuerpos con útero; más que nada el tema del aborto, que en Chile todavía está penalizado. No sé cómo serán las leyes en España, pero aquí seguimos así: una mujer que aborta, si no es por las tres causales que hace poquito se aprobaron, se va presa.
—¿Es una situación común a todo el continente?
—Este es un tema fundamental acá en Latinoamérica, donde se ha ido despenalizando el aborto desde hace muy poquito. Lo lograron las compañeras feministas en Argentina y acá, en Chile, todavía se está dando esa pelea, pero va avanzando bastante bien. Estamos en un proceso de conversión constitucional, por fin existirá una constitución distinta a la que nos legó la dictadura militar de Pinochet, ya se está redactando alguna norma que permita la despenalización del aborto.
—Y la poesía, o mejor dicho, los poemas de Fanny Campos Espinoza, ¿qué papel juegan en esa reivindicación?
—Tratan de casos reales, por lo general mis poemas se inspiran en la realidad histórica y actual. El último de mis poemarios, Ruleta rosa, trata de feminicidios ocurridos en Chile durante un año, los feminicidios íntimos, que son perpetrados por parejas, exparejas..., la violencia de género en las relaciones de pareja.
—Toda su obra está marcada temáticamente por esta causa...
—Por ejemplo, en otro libro mío, Esperpéntica, trato de casos de niñas y adolescentes que han sido embarazadas por su propio padre o padrastro en relaciones de violencia sexual, y obligadas a abortar porque no existía, hace poco, la ley de las tres causales que la llaman, que permite que una mujer violada pueda acceder a un aborto. Esas niñas se ven como obligadas a parir y a ser madres desde muy pequeñas.
—Por relajar un poco la entrevista, y porque toca preguntárselo: ¿prevé venir a España, a Jaén, a recoger el premio?
—Ojalá que así sea, pero todavía no me han dicho nada. Me encantaría.
—¿Conoce España?
—Lo único que conozco de España es Madrid, a través de un viaje que hice.
—y de Jaén, ¿qué sabe de esta ciudad que ha querido rendir tributo a Francisca Aguirre dedicándole un premio de poesía?
—La verdad, no conozco Jaén. Solo sé que producen aceite.
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