"Llevo más de 20 años esperando las escrituras de mi casa"

Julián Extremera aún no puede vender su vivienda de la calle Las Cumbres, reconstruida a principios de los años 2000 en un plan de infravivienda

Julián Extremera Sánchez (Jaén, 1958) dice que ya no sabe a qué puerta tocar ni a quién llamar. Lleva esperando más de 20 años las escrituras de su vivienda, ubicada en la calle Las Cumbres de la capital. "La tengo alquilada y el inquilino quiere comprarla, pero sin las escrituras es imposible. Estoy desesperado: llevo más de 20 años esperando", expresa el hombre, jubilado desde hace décadas por una discapacidad. 

La casa en cuestión formó parte de un plan de infravivienda acometido a principios de los años 2000, tal y como refleja un documento oficial que el propietario muestra a Lacontradejaén, datado en marzo de 2001 y rubricado por el interesado y por el entonces director gerente del Patronato de Asuntos Sociales. "Se le hace entrega de las llaves de la vivienda en el número 7 así como la licencia de primera ocupación y boletines de instalación eléctrica y de agua", reza el texto, que enmarca el caso en "la eliminación de la infravivienda en la calle Las Cumbres".

Como consecuencia de aquella actuación, Julián Extremera pasó a vivir temporalmente —recuerda de memoria que fueron tres años— en un piso de alquiler en la calle Doctor Juan Nogales, donde pagaba una mesada de "250 ó 260 euros" hasta que concluyeron las obras en el inmueble de la calle Las Cumbres.

Julián Extremera muestra a este diario las escrituras de su casa antes de la reforma. Son las únicas que tiene y ésa es su preocupación máxima: por más que tenga alquilada la vivienda aún no rezan las escrituras. "Nos prometieron que nos darían las llaves y los papeles en diez años —pone las dos palmos de las manos para ilustrarlo— y todavía estoy esperando", lamenta. Tiene incluso documentos sobre el valor de tasacion del inmueble, acreditado por arquitecto técnico.

LA ÚLTIMA NOTIFICACIÓN, HACE UN MES

La última queja registrada en el Ayuntamiento de Jaén por parte del afectado fue el pasado 11 de marzo, hace casi un mes. En ella resume su situación con un escrito de su puño y letra. "Llevo ya al menos cuatro y no recibo respuestas. Me pregunto qué pasaría si en lugar de ser un vecino normal fuese alguien importante", señala, y aclara que él no hace de portavoz de quienes están, en la misma calle, en una situación idéntica.

La intención de Extremera es, insiste, vender la casa y hacer una vida nueva en Los Villares. Ahora reside con su pareja en un apartamento de la calle Miguel Castillejo. "Yo sólo pido que se pongan en mi situación", concluye.