Entre el orgullo y la celebración familiar con La Rojita
Los espectadores festejan por todo lo alto el regreso de la selección nacional a La Victoria veintidós años después
Claro que importaba el resultado, pero más aún pasarlo bien. España, la selección Sub-21, regresó a Jaén veintidós años después y el Estadio Municipal de La Victoria fue una fiesta. Reinaron estampas familiares y de armonía en el estadio con motivo del choque saldado con victoria por la mínima para los futbolistas de Santi Denia.
La hinchada disfrutó con un protagonista icónico de La Roja, 'Manolo el del Bombo', incombustible allá donde juegue el combinado. "Es muy divertido. Animó todo el rato y la gente se echaba fotos con él", cuenta uno de los 9.453 espectadores que presenciaron el duelo clasificatorio para la Eurocopa de 2025 en Eslovaquia.
El ambiente permitía que los aficionados compartiesen las camisetas de sus equipos —Barça, Atlético de Madrid o del Real Jaén— en hermandad, todos al servicio de una generación que exhibe talento con nombres propios como Gabri Veiga, Pablo Torre e Ilias Akhomach.
Tanto en el estadio como en las redes sociales preponderó un sentimiento, el orgullo de acoger a la Sub-21 en un estadio totalmente renovado, apto par acoger un partido oficial de la FIFA.
"Hemos estado encantados en Jaén. Las instalaciones son maravillas. La gente ha llenado el campo. ¿Qué más queremos?", alabó Santi Denia, preparador nacional, tras el partido en rueda de prensa.
Tres puntos para España y una noche inolvidable para la capital y para la provincia. Que no haya que esperar otros 20 años.
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