Éxito rotundo de las Fiestas Íbero-Romanas
Linares se llena de visitantes durante la celebración de unas fiestas que se consolidan como referente turístico de la ciudad
Linares ha cerrado un fin de semana de ensueño. Su calles han respirado vida gracias a la quinta edición de las Fiestas Íbero-Romanas, que han sido un éxito rotundo de público y que se consolidan como referente turístico de la ciudad. La variopinta programación para todos los públicos ha atraído una vez más a una gran afluencia de visitantes que ha podido disfrutar de las tradicionales recreaciones históricas, representaciones teatrales y del Mercado de Romano, con tabernas y puestos de venta de artesanía y productos típicos de la época, que ha llenado el centro. Una de las actividades más esperadas fue el Circus Maximus en el coso de Santa Margarita. Más de ocho mil personas llenaron las gradas de la plaza de toros que, durante unas horas, rememoró los días gloriosos de la capital de Oretania. Fuegos, acrobacias, carreras de cuadrigas y luchas encarnizadas por el control de Cástulo entre las civilizaciones íbera, romana y cartaginesa hicieron las delicias de un público entregado.
Los espectadores revivieron aquellas tardes de sangre y arena en el coliseo romano, donde Máximo Décimo Meridio, un leal general hispano del ejército de la Antigua Roma, que es traicionado por Cómodo, se ve obligado a luchar a muerte por su honor, como en la película Gladiator, de Ridley Scott. Las legiones recorrieron las principales calles de la ciudad desde el Castrum —en la Plaza del Ayuntamiento— hasta el coso de Santa Margarita, donde los más pequeños se lo pasaron en grande con el espectáculo.
Las fiestas continuaron el domingo con más actividades, como talleres, teatro y visitas guiadas al conjunto arqueológico de Cástulo. Finalmente acabaron con el apagado del fuego sagrado y con un gran sabor de boca, a la espera de la edición de 2019.
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