La huelga sin final de los examinadores de la DGT

Desde la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) exigen que se cumplan los acuerdos de 2015 mientras más de 150 alumnos se quedan sin examinarse cada día en la provincia

"La huelga va para largo, está convocada hasta el 31 de julio y si para esa fecha no se resuelve, continuará en septiembre y puede que endurecida". Las palabras de Francisco Javier García, portavoz de la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) en Jaén dejan muy claro que los examinadores no van a desistir en sus reivindicaciones. Desde el pasado 19 de junio y hasta el 31 de julio, los 12 examinadores que la Dirección General de Tráfico tiene en Jaén se han plantado. No van a realizar ningún examen los lunes, martes y miércoles, aunque sí lo harán los jueves y viernes.

Tres días sin pruebas que dejan, según el sindicato CSI-F, a 156 alumnos cada día sin poder saber si son o no aptos para lanzarse a la carretera. Y "cuantiosas pérdidas" para las autoescuelas, tal y como señala Ángeles Pérez, presidenta de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Jaén.

Y si la huelga va para largo, también viene de largo. En 2015, los examinadores de todo el país se plantaron para exigir a la DGT un "complemento específico acorde con las características del puesto", ta y como explica García, quien subraya: "Se acordó la asignación de un complemento especifico que fuese acorde a las características del puesto. Es algo que llevamos reclamando desde 2008 y que en la anterior huelga se nos dijo que se iba a cumplir y no ha sido así. No estamos sentados en una oficina, sino que desempeñamos un trabajo de una elevada complejidad técnica, con una alta peligrosidad, penosidad y un gran responsabilidad".

LA MITAD DE EXAMINADORES

Estas son los cuatro fundamentos que los examinadores de las autoescuelas alegan para que la DGT cumpla con su promesa de aumentar este complemento, que, según explican desde Asextra, en la actualidad es tan solo 50 euros mayor al de otro trabajador de oficina, por lo que piden que sea de alrededor de unos 3.000 euros brutos al año. Unas razones que, a juicio de la asociación harían que el puesto fuese más atractivo y los que ya están dentro, como Javier García –42 años y 9 como examinador–, puedan seguir disfrutando de su trabajo sin el "desgaste mental" que supone para él y sus compañeros pasarse siete horas en el asiento trasero de un coche, "con frío, calor, una postura incómoda y con la obligación de decir apto o no apto al alumno y las posibles agresiones psicológicas, verbales y físicas que se pueden dar tras un no".

Además, tal y como explica García, el número de exámenes que realizan no está acorde con la normativa europea, ya que ellos examinan a 13 alumnos por día cuando desde Europa dicen que deben ser 11. Una razón que tiene su origen en que el número de examinadores de tráfico ha descendido hasta la mitad desde hace una década. "En 2008 éramos 24 examinadores y ahora solo somos 12. No es un problema de dinero, porque la propia DGT reconoció, en sede parlamentaria, que era necesario y justo este complemento y que servía que hacer atractivo el puesto, ya que muy pocas personas quieren ser examinadores. La dirección dijo que había dinero suficiente, solo que había que cambiarlo de un presupuesto de Trafico a otro, no había que tocar ni los presupuestos generales de la administración", denuncia García.

"ENORME TRASTORNO"

Las palabras de Javier García son claras y contundentes y, aunque no piensan ceder en sus reivindicaciones, hace hincapié en la necesidad de que se les comprenda: "Estamos ejerciendo nuestro derecho a huelga, pero también queremos pedir disculpas a las autoescuelas y a los alumnos que se quieren sacar el carné y no van a poder hacerlo antes del verano. Y a las autoescuelas, porque ellos son empresarios que ven como sus negocios no tienen esos ingresos y no son culpables de que los acuerdos alcanzados en 2015 no se hayan cumplido".

Una situación que comprenden desde la Asociación Provincial de Autoescuelas de Jaén, pero que supone para todos los empresarios del sector un "enorme trastorno". Así lo afirma la presidenta, Ángeles Pérez, quien denuncia que hoy, jueves, está realizando los exámenes de los alumnos a los que les tocaba pasar la prueba el lunes. "Comprendemos que están en su derecho de huelga, pero necesitamos que nos examinen. No podemos dejar a más de 150 alumnos sin su carné después de llevar mucho tiempo preparándose y a nosotros nos supone grandes pérdidas económicas, porque cada examen que no hacemos es un examen que no cobramos", explica la presidenta de las autoescuelas jiennenses.

Del mismo modo se expresa Francisco José Peinado, secretario de la asociación y que cuantifica en un 40% las pérdidas económicas que esta huelga puede tener para los centros de formación vial. "Perdemos un 60% de capacidad de producción y supone una ruina económica, porque si ya tenemos una competencia gravísima y desleal con publicidades presuntamente engañosas entre las mismas autoescuelas, ahora se suma que mucha gente deja de lado el carné de conducir porque no saben cuándo se lo van a poder sacar", explica Peinado, quien resalta que comprende las exigencias: "Solo piden lo que se les prometió".

SIN CARNÉ

Francisco Moreno es uno de esos alumnos. Lleva alrededor de un mes preparándose para sacarse el carné de conducir y se enteró de la huelga mientras realizaba una de sus prácticas. Tenía pensado presentarse en la primera quincena de julio, pero ahora, lo ve "difícil". "Me trastoca los planes, porque quería tener el carné de conducir cuando acabase el curso para poder añadirlo a mi currículum y poder buscar un trabajo. Ahora ya no sé si me podré examinar este verano o ya tendré que esperar a septiembre, con todo lo que eso conlleva para un joven que está buscando empleo".

Acaba de terminar un Grado Superior en Integración Social y el verano no se presenta tal y como lo tenía planteado con su 'L' en la parte trasera. "Ahora ya no sé si seguiré o lo dejaré para septiembre, aunque me da miedo que se me olvide todo lo que he ido aprendiendo hasta ahora, porque el coche es, sobre todo, práctica", concluye.

¿SOLDADOS?

Hace tan solo unos días, La DGT ofreció, según CSI-F, la creación de una escala específica de personal examinador y ampliar la plantilla actual de 750 personas, con 100 adicionales, procedentes de diferentes departamentos del funcionariado, entre ellos el del personal de tropa y marinería del Ministerio de Defensa. Así, tras la  respuesta de la Administración a incrementar el número de examinadores con personal militar, CSIF ha manifestado que estará "pendiente". "Habrá que explicar cómo se les va a dar la titulación y formación exigida, además de tener que respetar los principios de igualdad, mérito y capacidad en el acceso a la Administración.".