Hugo Salazar estrena su pólvora en Alcalá
El cantautor sevillano conecta con el público gracias a una actuación cercana en la Caseta Municipal el día grande de la Feria de San Mateo
Bien pasada la medianoche, casi a la una de la madrugada, Hugo Salazar (Sevilla, 1978) subió al escenario de la Caseta Municipal de Alcalá acompañado de sus músicos. Una hora antes, más o menos, había pasado por ahí mientras cantaba el grupo que lo precedió.
—Iba con un guardaespaldas —comentó un señora mayor, que contempló ese momento del artista en el umbral de su actuación.
Más allá de ese instante lógico de proteger su seguridad, Hugo Salazar —o Hugo, como se llamaba en sus comienzos— resultó un invitado cercano el día grande de la Feria de San Mateo. Entre canción y canción, interpelaciones amables al público. Ni rastro de ínfulas en un artista que ya había actuado también este verano en Jaén, concretamente en Lopera.
Cantaba Hugo Dónde estaré entre un público heterogéneo, con tantas mujeres y hombres de edad avanzada como chicas jóvenes. Si bien había un buen número de personas en la caseta, resultaba fácil acomodarse de un lado a otro por las primeras filas en busca de fotografías para inmortalizar la feria en la que Hugo pasaba por allí. Pasaba por aquí fue, por cierto, el primer tema que cantó en televisión.
—Quiero agradecer el trabajo de los técnicos —dijo tras completar Dónde estaré.
El sevillano fue generoso; el sonido admitía mejoras.
Después cantó Besos, del disco Nuevas Latitudes, donde abundó en la faceta de crear letras y melodías propias. Salazar tiene algo de Manolo García por más que las comparaciones resulten delicadas. También hay cierta reminiscencia de Maná.
—¡Qué viva la Virgen de las Mercedes! —remató.
Y ahí se metió en el bolsillo, entre otros, a una mujer, el vestido rojo, el collar de perlas blancas, más de seis décadas de vida, que cantaba las letras del artista y se movía como la aficionada más joven.
Salazar tuvo tiempo de recordar que un día fue Hugo el de Operación Triunfo. Gracias a su paso por el programa grabó El héroe de tu vida. De aquel disco guarda el sinsabor de que no decidió “absolutamente nada”; había que acatar las órdenes del mercado. Baladista moderno, le dijeron entonces. Y él aceptó aun cuando el cuerpo le pedía ser lo que es hoy, un intérprete de pop aflamencado, con ese gusto carnavalero que también tienen otros compañeros de su generación, como el mediático Manuel Carrasco y Miguel Nández, que combina la comparsa en el Carnaval de Cádiz con la canción de autor.
CULTURAS | El sevillano @hugosalazar_ ha cantado su popular 'Dónde estaré' en Alcalá.#SanMateo2017 pic.twitter.com/9d8OJTcug9
— Lacontradejaén (@lacontradejaen) September 23, 2017
El sevillano recuperó Quiero que vuelvas, single del álbum de estreno. Lo cantó primero con un mínimo acompañamiento musical mientras el público le devolvía parte del estribillo. Luego ya sonó a pleno rendimiento, y Hugo bajó a la primera fila, sin rastro de guardaespaldas, para ponerle el micrófono y abrazar a esa mujer del vestido rojo que lo esperaba para darle un beso más de abuela que de fan. Quizá ambas cosas. El cantante también besó a una joven de la primera fila que rompió a llorar y tuvo que recibir el calor de su familia. Efectos de tocar al ídolo.
Siguió la noche con Pólvora, la última canción que ha compuesto en la previa de nuevos trabajos que están por llegar. Al andaluz le quedan las ganas de disfrutar de la fama tranquila. De tocar la guitarra en una feria al lado de la churrería. Más pólvora en familia. Con los focos justos. Rodeado de gente que lo estima.
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