La actualización del catastro cambia el IBI en seis municipios

El Impuesto de Bienes Inmuebles sube en Cazorla, La Puerta de Segura y Albanchez de Mágina, mientras baja en Castellar, Campillo de Arenas e Iznatoraf

Seis municipios de la provincia comienzan 2019 con cambios en su valor catastral y la mitad de ellos registrará una subida, según la revisión que aprobó el Gobierno en el último Consejo de Ministros de 2018 y que publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado fin de semana.

El Ministerio de Hacienda ha incluido a Cazorla, La Puerta de Segura y Albanchez de Mágina entre los municipios que desde el 1 de enero deben aplicar nuevos coeficientes catastrales, lo que supondrá un incremento en la valoración de todas las propiedades de estos pueblos. En las localidades serranas será del 3 por ciento, mientras que en Albanchez del 2.

Esta actualización no implica que varíe el tipo del impuesto —que es de carácter municipal y que fija cada Ayuntamiento—, pero sí lo hace la valoración del inmueble, que es la base imponible sobre la que se aplica. La actualización supone la revisión de valoraciones que no se habían modificado desde el año 1994, como es el caso de La Puerta, o 2000, en Cazorla. En este último caso, su alcalde, Antonio José Rodríguez, recuerda que su Gobierno ha bajado el tipo impositivo del IBI urbano en los últimos años, lo que le permite amortiguar los incrementos de los valores catastrales.

El tiempo transcurrido desde la última actualización es el que indica qué municipios tienen que revalorizar al alza y cuáles a la baja los inmuebles y en qué cuantía.

En Castellar, Campillo de Arenas e Iznatoraf, que actualizaron por última vez el catastro entre 2005 y 2013, verán ahora reducido el valor de los inmuebles. Todos ellos en un 3%.

¿QUÉ ES EL IBI?

El Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) o también conocido como 'contribución' es un tributo que anualmente tienen que pagar los propietarios de todos los inmuebles -viviendas, garajes, locales...- ya sea urbanos, rústicos o con características especiales.

Es el catastro y los valores que en él se estipulen donde se registran y clasifican estas propiedades. Es uno de los impuesto municipales más importantes por ser una de las principales fuentes de ingresos. A pesar de su obligatoriedad, hay edificios exentos de este pago, como las propiedades de la Iglesia o las del Estado, entre otras.

¿CÓMO SE CALCULA?

Su cálculo depende de dos variables, una cuantificada en el valor catastral del inmueble, es decir, el valor del suelo más el valor de la construcción; y otra, el tipo impositivo que cada consistorio fija, dentro de unos márgenes, y que determina cuánto se ha de pagar por los inmuebles de su territorio.

Básicamente, al valor catastral se le aplica un coeficiente que varía entre un 0,4% y un 1,3%, en el caso de los inmuebles urbanos y que determina del pago. Jugar con las dos variables es lo que hace que baje no suban los recibos, en el caso de los ayuntamientos, lo mejor es bajar el tipo impositivo para amortiguar subidas.