El karateka de 13 años abonado al podio

El alcalaíno Ismael Pérez acaba tercero en el ranking nacional de menos de 55 kilos y logra podio en todos los torneos del año

Acaba la temporada e Ismael Pérez ha firmado un año espectacular: podio en cada torneo en el que se ha presentado. El karateka de 13 años es ya "un veterano", como dice su padre, Francisco Javier Pérez. Esa veteranía paradójica le ha valido para ser el tercero en el ranking nacional de su categoría, kumite juvenil masculino de peso inferior a 55 kilogramos. Es el mejor karateka jiennense de su edad.

Pérez empieza a ganar fama no solo en su municipio, Alcalá, donde tanto le conocen desde que con cuatro años ingresó en el Club Montes. La velocidad y la precisión que demuestra en el tatami le llevarán más pronto que tarde a la selección española. El año que viene parece que será el momento, pues pasará a ser cadete. Son las cábalas del padre, que asisten encantado a la progresión del deportista.

CAMBIO DE PESO, KARATE MÁS MADURO

Esta temporada ha sido algo distinta para el menor porque ha competido en dos categorías. Aparte de la antes mencionada también lo ha hecho en menos de 45 kilos. ¿Cómo le ha ido? Quinto en la clasificación general.

En el verano hubo un cambio de peso que le hizo competir en dos formatos. Lo curioso es que ha acabado campeón en la fase final de la liga nacional de kárate, pese a que empezó en la primera fase —celebrada en Guadalajara— en la misma categoría, pero en el peso inferior a 45 kilos. "En la segunda fase subió de peso, algo que es muy normal en estas edades. Aun así, quedó en tercer puesto y pudo competir en la fase final, donde logró un holgado primer puesto", explica Álvaro Rosales, técnico del Club Montes de Alcalá.

El preparador destaca la "capacidad de trabajo" que ha exhibido Ismael Pérez a lo largo del año. "Ha evolucionado mucho porque atiende a los consejos que se le dan", afirma.

TROFEOS Y EVOLUCIÓN PERSONAL

Francisco Javier Pérez echa cuentas y calcula que su hijo ha competido seis torneos de ámbito nacional. Al padre le gusta la destreza y la rapidez que lo determina, a su juicio, como luchador.

En que concierne al carácter, una anécdota: tras quedar segundo en el Campeonato de España de abril de este año, superó al rival que lo derrotó por 7 a 0 en un campeonato celebrado en Navarra.

El año pasado Pérez fue primero en el mismo campeonato; en 2015, tercero y también lo conquistó en 2014. Pasado, presente y futuro de un karateka que solo sabe estar en un sitio tras las peleas. En el podio.