Las obras de Deán Mazas comenzarán después de la Virgen de la Capilla

El Ayuntamiento de Jaén celebrará el viernes la mesa de contratación para la adjudicación del polémico proyecto, al que aspiran tres empresas

El viernes la mesa de contratación del Ayuntamiento de Jaén adjudicará el polémico proyecto de reforma de la Plaza Deán Mazas y la calle Cronista Cazabán, enmarcado dentro del proceso de peatonalización que acomete el Gobierno municipal en el centro de la ciudad. Tres empresas pugnan por la ejecución del proyecto y las obras comenzarán presimiblemente después de la Feria de la Virgen de la Capilla, que se celebrará del del 8 al 11 de junio, según avanza el concejal de Hacienda y Contratación, Manuel Bonilla. La idea es no perjudicar a los establecimientos de la zona en unas fechas muy marcadas y de especial importancia al celebrarse las fiestas en el barrio. Los trabajos cuentan con un presupuesto inicial de 212.148,68 euros, más 44.551,22, de IVA, y un plazo de ejecución aproximado de 3 meses, por lo que estarían acabadas para mediados de septiembre.

La intervención destató una enorme controversia nada más anunciarse su licitación. Solo el equipo de Gobierno del Partido Popular aprueba la adecuación de una de las zonas más representativas del centro de la ciudad. Los dos grupos de la oposición, el Partido Socialista y Jaén en Común, mostraron su rechazo no solo en el pleno, sino también a pie de calle en la concentración ciudadana celebrada 18 de febrero, en la que participaron colectivos en defensa del patrimonio de la ciudad, además de organizaciones, como Podemos o el Partido Comunista.

La iniciativa se engloba en el plan de peatonalización del Ayuntamiento y, según la concejal de Servicios Técnicos Municipales, Rosa Cárdenas, se trata de un proyecto “sencillo” con el que se “ganará en accesibilidad y reforzará el proceso peatonal en beneficio de la ciudad con el único objetivo de que se convierta en un espacio asequible exclusivamente para el uso y disfrute de los jiennenses y turistas que nos visiten”.

La indignación también reside en la eliminación de árboles y el empleo de granito. La Comisión de Patrimonio rechazó en primera instancia los trabajos, al considerarlos poco respetuosos con un enclave que tiene la máxima protección. Sin embargo, después, dio su visto bueno. No ocurrió lo mismo con la Plaza del Pósito que tras recibir el informe negativo de la Delegación de Cultura fue retirada del perfil del contratante del Ayuntamiento, a pesar de que forma parte del proyecto global para estos espacios públicos de la capital.