La Fábrica de la Risa funciona

La Fábrica de la Risa funcionó a pleno rendimiento.

El miedo de las primeras veces estaba presente desde los inicios de organización de este Primer Concurso Nacional de Monólogos de Frailes. El hacer algo novedoso puede suponer un arma de doble filo: que sea un éxito por el factor novedad o un desastre por el desconocimiento. Pero en este caso parece que la balanza se inclina hacia el primer lado.

La última semana antes del 21 de abril fue la pista de despegue: las distintas acciones llevadas a cabo en redes sociales, la pegada de carteles y el boca a boca animaron la venta de entradas para que casi 100 personas asistieran a la primera semifinal de este concurso novedoso no solo en Frailes, si no en la comarca de la Sierra Sur y me atrevería a decir que incluso en la provincia de Jaén.

Y es que sin público, esto no tiene sentido. Ningún cómico, por muchas tablas que tenga, se siente cómodo actuando para un grupo reducido. Nos gusta el grupo, el colectivo, por entre otras cosas, el mágico efecto “contagio en cadena” que tiene la risa. Llámalo tópico, pero necesitamos el calor del público, por nuestro bien, por el del show y por el del propio público. Aunque parezca que un monólogo lo hace alguien solo sobre el escenario, se trata de un claro ejemplo de trabajo en equipo.

El público frailero y nuestros vecinos alcalaínos dieron un claro ejemplo de público profesional, respetuoso y predispuesto a la risa, pese a ser nóveles la mayoría de ellos, pero se tomaron muy en serio eso de formar parte de este Dream Team sobre el terreno de juego, algo que alabaron durante la posterior cena los tres semifinalistas del día.

La primera semifinal fue un éxito. Así lo siento. Como jefe de ceremonias, funcionó el texto escrito en exclusiva para este concurso con localismos, siendo siempre necesario algo así para calentar al público y romper el hielo a los cómicos participantes, los cuales lo agradecieron y el público disfrutó de una perspectiva cómica de las cosas del pueblo.

Los protagonistas del día, los tres cómicos que desplegaron sus textos, estilos, personajes y armas improvisadoras sobre el escenario, despertando aplausos y risas a niveles similares, siempre altos, rozando el límite de los decibelios que empiezan a ser causa de disputa con vecinos, pero como en este caso, el principal vecino del gimnasio del colegio público Santa Lucía de Frailes es el Ayuntamiento, el coorganizador de este evento no podía estar más encantado.

Lo pensé cuando seleccionamos a los 6 cómicos que participan y de momento se está confirmando: no quisiera ser Jurado por nada del mundo. Lo van a tener muy complicado. 

Manu “El Gamba”, El Gran Juni y Juanma Molina dejaron el listón bien alto a los compañeros que llegan este próximo sábado 28 de abril. 

Por delante queda una semana de trabajo, preparar nuevo texto y continuar con la promoción, ya que “cuantos más semos, mejor lo pasemos”.

En estos tres fines de semana, la Fábrica de la Risa estará a pleno rendimiento, intentando incrementar la producción en los dos fines de semana que restan. Ojalá despierte tantas sonrisas como su fuente de inspiración: la Fábrica de la Luz. Habrá que ir pensando en crear un polígono industrial creativo en Frailes para albergar a este tipo de fábricas (:D).