La perrera recibe más críticas por "malas condiciones"

Abyda, que critica cómo trasladan a los perros en jaulas oxidadas, aclara que el colectivo está integrado por voluntarios, pero no está encargado de la perrera

La perrera municipal vuelve a recibir críticas por parte de Abyda, el grupo de voluntarios que ya denunció en reiteradas ocasiones la necesidad de mejorar la instalación. Recientemente, el colectivo se ha quejado del estado de las jaulas que utilizan los encargados para transportar a los canes desprotegidos. "Recogen el perro con un camioncillo y una jaula oxidada. Lo dejan entre los camiones de la basura, hasta que alguien se da cuenta o llega algún voluntario de Abyda", critica el colectivo a través de su cuenta de Facebook.

Hay otro factor que ha propiciado las quejas públicas de Abyda: la confusión de particulares con respecto a las competencias reales del colectivo. "Hemos comprobado que la información que se da desde el Ayuntamiento no es correcta. Mucha gente llama pensando que la perrera es Abyda", aclaran desde el colectivo. Si bien los voluntarios pueden entrar y salir para ayudar con labores de operatividad, la perrera es una instalación pública, no privada. Es decir, pertenece al Ayuntamiento.

TENSIONES ACUMULADAS

El estado de la perrera ya propició que Abyda amenazase con denunciar el asunto al Seprona. El vídeo de un particular —difundido por este medio— mostró las carencias del lugar.

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El Pacma también se interesó por el asunto. De hecho, Manuel Serrano, coordinado provincial del partido animalista, mantuvo una reunión con la concejal de Sanidad, Yolanda Pedrosa a comienzos de año. La edil admitió que la perrera precisaba algunas mejoras y prometió que el Ayuntamiento intervendría.

"Sólo hay 12 jaulas y en algunas no se pueden meter mas perros, porque son dominantes y atacan a los nuevos. También algunos mueren enfermos, como le ocurrió a uno que mordió a una rata. Falleció después de varios días ingresado", relata Abyda. Es obvio que las condiciones no son del agrado del colectivo. Hay conflicto por delante.