La Policía Local pone el foco en las zonas de ocio

Los agentes realizarán, a partir de este fin de semana, controles de alcohol y drogas a conductores en vías próximas a zonas de ocio en los que utilizarán el drogotest

Primero fueron las alcoholemias, pero ahora el cerco se ha ampliado a las drogas. La Policía Local de Jaén comenzará, a partir del día 16 de febrero, y de manera indifenida, a realizar controles de droga en la ciudad. Será gracias a la adquisición de un detector de sustancias prohibidas denominado drogotets. Los agentes lo estrenarán en los dispositivos de alcohol y drogas que el Ayuntamiento pondrá en marcha en las vías urbanas próximas a las zonas de ocio de la capital durante los fines de semana.

El objetivo es ayudar a la Policía Local para que pueda multiplicar la detección de los conductores que, tras tomar drogas, circulan por las calles de Jaén poniendo en riesgo la seguridad de los peatones y la de los demás ocupantes de otros vehículos. Al aumentar estos controles, puede mejorarse la prevención de los graves accidentes de tráfico que pueden llegar a provocar este tipo de infractores, ya sea por consumo de alcohol o drogas.

El concejal de Seguridad Ciudadana, Tráfico y Transportes, Juan Carlos Ruiz, señala que este novedoso medio técnico, que ha supuesto una inversión de 5.200 euros, se incorpora al servicio de la Policía Local con el reto de “mejorar su capacidad de intervención y elevar los niveles actuales de prevención y control en materia de seguridad vial”. El modo de proceder responde a un protocolo que la Fiscalía de Seguridad Vial de Andalucía ha establecido para toda la comunidad autónoma. En primer lugar, cuando un agente intercepta un vehículo cuyo conductor da muestras de no conducir en plenitud de facultades, se procede a someter al individuo a la prueba de alcoholemia. Si dicha prueba da negativa, es cuando se realiza el control de drogas, que se hace con una muestra de saliva.

Este aparato puede detectar simultáneamente hasta cinco  tipos de drogas diferentes en una primera prueba indiciaria en muestra de saliva  para concretar positivos en drogas como la cocaína, los opiáceos, las anfetaminas, las metanfetamina y THC (hachís). Ante un posible resultado positivo a alguna de las sustancias controladas en el test indiciario salival, o por los signos externos apreciados en la persona sometida a dicha prueba, se procedería a tomar una nueva muestra de saliva en un tubo precintado que sería remitido a un laboratorio legalmente autorizado, cumpliendo el protocolo que garantice la cadena de custodia de la prueba y resultados obtenidos.

Estos controles se añaden a las actuaciones que de forma habitual y periódica vienen realizando los agentes locales en los casos de accidentes de circulación, infracciones de tráfico graves o campañas especiales de control y vigilancia del tráfico en colaboración con la DGT. Los agentes de la Policía Local pertenecientes a los equipos de Atestados e Informes ya han realizado un curso de capacitación para la detección de drogas puesto en marcha por la Escuela de Seguridad Publica de Andalucía (ESPA) el cual habilita a los agentes para realizar las citadas pruebas de detección de drogas que estarán revestidas de todas las garantías legales.

Juan Carlos Ruiz subraya que con la práctica de estos controles se pretende reducir, en la medida de lo posible, la incidencia negativa que el consumo de alcohol y drogas tiene en la circulación por vías urbanas, especialmente durante los fines de semanas, por las zonas próximas a lugares de expansión y de ocio. “Esta incidencia negativa se manifiesta tanto en los accidentes como en la conflictividad del tráfico rodado, por lo que resulta necesario controlar las tasas de alcoholemia y drogas en el ámbito municipal con el fin de garantizar la máxima seguridad vial”, ha aseverado el edil.

TIPOS DE SANCIONES

La sanción por este tipo de delitos contra la seguridad vial consiste en la privación del permiso de conducción durante un plazo de entre 1 y 4 años y, además, con penas de prisión, multa o trabajos en beneficio de la comunidad. La conducción bajo la influencia de drogas, en todo caso, lleva consigo denuncia administrativa con multa de 1.000 euros, con 50% de reducción y detracción de 6 puntos del permiso de conducción.

El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses destaca en un informe que hasta un 43% de los conductores fallecidos por causas de accidentes de circulación en España habían consumido previamente drogas, alcohol o psicofármacos.