EL ETERNO COMPÁS DE ESPERA

Los vecinos de Las Protegidas de Jaén viven en un limbo. Han escuchado promesas de un bando y de otro mientras las paredes de sus viviendas poco a poco se vienen abajo tras años en compás de espera

Sevilla. 16 de marzo de 2006. Publicación del Boletín Oficial de la Junta de Andalucía número 51:

"Resuelvo:

Primero. Inscribir colectivamente, con carácter genérico, en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, nueve bienes inmuebles del Movimiento Moderno de la provincia de Jaén, cuyas identificaciones y descripciones figuran como Anexo a la presente Resolución.

Segundo. Instar al asiento de este bien inmueble en el Registro Autonómico de Instrumentos de Planeamiento, de Convenios Urbanísticos y de los Bienes y Espacios Catalogados."

Estas frases fueron la culminación de un procedimiento que comenzó en 2004. De una tacada se catalogaban a la Estación de Autobuses y Hotel Rey Fernando, la Presa del Jándula, el Cine Tívoli y la Viña Gisbert en Andújar, la antigua Fábrica Tecosa en La Carolina, Correos y el Mercado en Úbeda, el Poblado de Miraelrío de Vilches y Las Protegidas. Un reconocimiento que se ha convertido en un calvario desde hace más de una década. 

Esta es la historia de la lucha de las calles Virgen de la Cabeza, Pintor Zabaleta, Baltasar del Alcázar, Baeza, Fermín Palma, Linares o Andújar. De decenas de viviendas y vecinos, algunos con entre 80 y 90 años, que apenas pueden salir de sus casas. No tienen ascensor y lo que debe ser el calor del hogar se convierte en una trampa en la que quedan atrapados. 

—Estamos exactamente igual que hace 17 años. 

Juan José de la Torre es el presidente de la Asociación de Vecinos San Eufrasio y del Grupo 1060-José Antonio. 

—Cuando hay elecciones todo el mundo nos llama y nos prometen cosas. Después, esos mismos se olvidan. Nos llamó el nuevo delegado de Fomento, Jesús Estrella. Nos reunimos con los técnicos y nos dijeron que iban a estudiar una solución. ¿Ahora lo van a estudiar después de 17 años?

Sus declaraciones son la viva voz de la impotencia. La desesperación de cuatro manzanas de las Viviendas Protegidas que basaron su diseño en los ensayos que se hacían en Europa persiguiendo la optimización de la iluminación y la ventilación para todas las viviendas. Era la España de los años 40, posguerra, y los inmuebles se edificaron al amparo de la Ley de Protección a la Vivienda de 19 de abril de 1939. “Casas baratas y para obreros", se las bautizaron.

En el texto del Boletín Oficial de la Junta de Andalucía de aquel 2006 se elogia la doble crujía, que permite formalizar los patios interiores huyendo de las habituales soluciones en manzana cerrada, al tiempo que se juega con la volumetría de los edificios que van adaptándose a la pendiente del terreno. "Constituyen una contribución a todo el caudal de la experiencia urbanística y arquitectónica llevada a cabo por la arquitectura del Movimiento Moderno en Europa". Esas palabras hay quienes hoy las tienen grabadas a fuego.

El primer grupo de viviendas construido en Las Protegidas fue promovido por el Ayuntamiento de Jaén y consistió en una comunidad de 96 viviendas destinada a funcionarios y subalternos. El segundo lo impulsó la Diputación. Fueron 88 casas destinadas a alquiler para los trabajadores o pensionistas vinculados al organismo provincial. Otro de los grupos, denominado José Antonio Girón o CNS, fue promovido por la Obra Sindical del Hogar y de la Arquitectura. La última manzana la promueve el Ayuntamiento. Las Protegidas fueron y son la representación de la arquitectura de vivienda social.

Pero sus vecinos se sienten víctimas de los partidos políticos y Juan José de la Torre no puede evitar ironizar con lo que les está ocurriendo. 

—Voy a tener que ir a ver a Pedro Sánchez y decirle que algo que hizo el generalísimo Franco lo quieren hacer monumento, ahora que con la Memoria Histórica se están cambiando los nombres de las calles y quitando estatuas y títulos nobiliarios. 

¿Qué es lo que piden desde hace años? Rehabilitar sus casas y descatalogarlas. Ese es su objetivo porque hay viviendas, sobre todo las del Grupo 1060-José Antonio, que ese encuentran en muy mal estado, con tejados de cañizo y problemas en las vigas. Tan mal está la principal cuadrícula del barrio que les llevó a interponer un recurso por la vía de lo contencioso-administrativo contra la Junta por esa catalogación que está siendo un lastre.

—Queremos realidades. 

LAS ADMINISTRACIONES

Y en el camino de buscar esas realidades están las administraciones. 

El nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía asegura que ha considerado el problema de Las Protegidas una "prioridad" desde su toma de posesión. Existe una "voluntad política clara" y una determinación de las consejerías de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio y de Cultura y Patrimonio Histórico para contribuir a una solución. Defienden la reunión que el delegado territorial de Fomento y Cultura, Jesús Estrella, mantuvo con los vecinos en el mes de marzo, tras tomar posesión. En el encuentro escuchó sus posturas y pudo conocer la problemática a la que se enfrentan a diario tras la situación de “limbo urbanístico” en la que se encuentran desde hace años.

—Hubo una promesa de invertir 24 millones de euros en su rehabilitación, que quedaron en meras palabras. Después, se produjo un gasto de 700.000 euros de dinero público en la redacción de proyectos que terminaron en la papelera.

Las consejerías han estudiado técnicamente las posibles soluciones, que reconocen, en declaraciones a este periódico, que son complejas y difíciles de articular. En este sentido, la Junta lanza un mensaje de "prudencia", porque un problema como ese, que lleva pendiente 13 años y afecta a 484 familias, entienden que no puede solucionarse de forma rápida.

El problema de Las Protegidas, su deterioro y la falta de soluciones implica también al Ayuntamiento de Jaén, además de a los propietarios y sus respectivas comunidades de vecinos. De ahí que la Junta impulsara, hace unos meses, una mesa técnica de trabajo. El objetivo es alcanzar una solución de consenso a las necesidades de modernización de los edificios e inmuebles por parte de los técnicos de la administración autonómica y municipales.

—De este modo, los propietarios podrían vivir en condiciones dignas, la seguridad de los vecinos estaría garantizada, dando respuesta a los problemas estructurales de algunos edificios. Asimismo, se podrían actualizar aspectos básicos urbanísticos a día de hoy, como la accesibilidad, o las zonas libres, que se utilizan como aparcamientos, y se potenciaría la conservación el valor patrimonial catalogado.

Por su parte, el Ayuntamiento de Jaén se muestra favorable al cumplimiento del acuerdo que, en su día, se firmó para que se aplicara a Las Protegidas el modelo que ya funciona en la barriada de Santa Adela, de Granada, tal y como confirman a este periódico. ¿En qué consiste esta fórmula? Se trata de una reforma urbanística total de un área que comprende casi 1.500 viviendas, que fueron construidas a finales de los años 50 para los damnificados del terremoto de Granada de 1956. Fue la respuesta a una reivindicación histórica de los vecinos y colectivos del barrio del Zaidín que se encontraban en una situación similar a la de los jiennenses. 

—Santa Adela ya está rehabilitada. Las Constancias, de Jerez, va por el camino y hace poco pasó lo mismo en Huelva. Y nosotros aquí seguimos, con unos políticos que son unos calienta sillones.

No hay que olvidar que de forma paralela al proceso de catalogación, el Pleno del Parlamento de Andalucía, en sesión celebrada los días 28 y 29 de septiembre de 2005, aprobó una Proposición no de Ley instando al Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía a que, dentro del Programa de Arquitectura Singular, se redactarán los diferentes proyectos de intervención necesarios para la rehabilitación de este espacio. Cuatro eran los objetivos: facilitar la accesibilidad de los usuarios a las viviendas y a los espacios libres interiores, solucionar las patologías existentes en la edificación para mejorar las condiciones de habitabilidad de los inmuebles, dotar de infraestructuras para la dotación de energías alternativas y dotarlas de una nuevo aparcamiento racional y funcional. Las propuestas, como la del Grupo C.N.S., se quedaron sobre el papel.

Y es así como desde hace más de una década, los vecinos de Las Protegidas de Jaén viven en un eterno compás de espera. Han escuchado promesas de un bando y de otro. Han visto pasar a los representantes de los diferentes partidos, siempre dispuestos a ayudarles. Pero mientras llega la tan necesaria intervención, las paredes de sus viviendas poco a poco se vienen abajo junto a sus fuerzas y sus esperanzas.