Leontxo García y la belleza del ajedrez
El periodista repasa las rivalidades históricas del ajedrez y apuesta por la inclusión del deporte en horario lectivo
El periodista Leontxo García propuso ayer Un viaje fascinante por el mundo del ajedrez en el Convento de Capuchinos de Alcalá. La ponencia que protagonizó después de una mesa redonda fue una delicia para los amantes del deporte. Historias del ajedrez. Búsqueda de la belleza en el juego. La pasión del comunicador transmitida al público en un par de horas. El reportero confesó, tras una pregunta de este diario, que Linares fue una segunda casa para él y que el famoso torneo que impulsó Luis Rentero tuvo continuidad durante un tiempo gracias al patrocinio del Ayuntamiento. “Hasta que llegó la crisis. Me emociona hablar de Linares”, admitió.
EL HÉROE CONTRA EL TRAÍDOR
García —el micrófono diadema, camisa azul y pantalones negro— repasó las rivalidades históricas que ha propiciado el deporte. Filipinas, 1978: el duelo Anatoli Kárpov-Viktor Korchnói analizado al detalle, con toda la repercusión que tuvo en su época. “La batalla se vendió como el héroe soviético, Karpov, contra el traidor”, explicó el periodista. Ocurrió que Korchnoi se escapó de la Unión Soviética molesto con las preferencias de la URSS; desertó del ajedrez, asilo político mediante, y se ganó el apodo de ‘el traidor’.
“Hay fotos de ambos antes de la última partida, que duró dos meses y que los llevó al borde del agotamiento físico y mental. Para que luego digan que el ajedrez es cómodo y no cansa”, precisó el reportero.
El analista también comentó la denominada guerra de los yogures en el contexto de aquel duelo. Las suspicacias por los yogures que tomaba Kárpov llevó al árbitro a decidir que tendría que comerlos del mismo sabor, a la misma hora siempre y servidos por el mismo camarero. Tan increíble como cierto, según apuntó García. Kárpov llegó a vencer hasta en tres ocasiones al suizo Kornchnói. El primero llegó a confesarle al periodista español que entonces pensó que su vida ya estaba resuelta. “No sabía que había nacido un niño a unos 2.500 kilómetros en Azerbaiyan: Garri Kaspárov”, continuó.
“FUE LA MAYOR RIVALIDAD DE LA HISTORIA DEL DEPORTE”
Sevilla, 1987. Título de la película, el Héroe contra el Rebelde. En las crónicas de finales de los ochenta, García ya remarcaba que Kárpov y Kaspárov se odiaban tanto como se necesitaban. A juicio del periodista, con experiencia en Juegos Olímpicos, es la mayor rivalidad de la historia del deporte. Ni Messi contra Cristiano; ni Nadal contra Federer. Los cinco duelos por el campeonato del mundo entre 1984 y 1990 dejaron un balance de solo dos puntos favorables para Kaspárov. Aquella pelea se tradujo en algunos datos: más de 500 horas frente a frente rodeados de cámaras; miles de horas el uno pensando en el otro “de forma obsesiva” durante seis años. “Me dieron de comer durante aquel periodo: estuve más tiempo con ellos que con mi familia”, recordó.
La audiencia televisiva fue fiel reflejo del interés que despertó la batalla deportiva entre el superhéroe soviético y el representante de la vieja guardia comunista: más de 13 millones de espectadores. “Son cifras solo equiparables a las que tuvo la selección española de fútbol cuando ganó el Mundial, por ejemplo”, indicó.
LAS HERMANAS POLGÁR Y LOS GENIOS DEL SIGLO XXI
Habló del caso de las hermanas Polgár, tres mujeres que son el experimento pedagógico de sus padres docentes. Nunca fueron a clase salvo para hacer exámenes. Los progenitores quisieron demostrar que los genios se hacen con el trabajo y que las mujeres podían ser igual o mejores que los hombres en el ajedrez. Así, Susan, la mayor, fue campeona del mundo; Sofia ganó el abierto de Roma superando a hombres, y Judith, la menor, es la única mujer que ha estado entre los diez mejores jugadores del mundo —ahora no hay ninguna mujer en el ‘top 100’. “Yo no recomiendo el experimento de los padres, pero creo que sí acertaron en recomendarles viajar. He visitado 97 países y sustento que es la mejor escuela de vida”, indicó.
El periodista de El País también mencionó a dos genios recientes, como Anand y Carlsen: “El primero tenía ideas geniales en décimas de segundo; Carlsen ya se sabía los nombres de todos los países del mundo, las banderas, las capitales, el número de habitantes y la superficie con solo cuatro años”, señaló, y dijo que está escribiendo un libro sobre el ajedrecista noruego.
En lo que concierne a España, García explicó que es el país más activo del mundo en el número de torneos, así como la primera referencia mundial sobre ajedrez educativo, seguida de Argentina. El cronista, crítico con la Federación Española, aboga por incrementar el precio de las licencias como medida para mejorar la posición de España en el ranking mundial, actualmente en el número 15. También apuesta por introducir el ajedrez en el horario lectivo.
A preguntas de los asistentes dijo que él disfruta más analizando partidas de jugadores amateur “salvo excepciones”. Y sobre el juego actual admitió que la estrategia defensiva se ha impuesto. “Propongo que no haya empates, que una partida en tablas se resuelva con una corta con los colores cambiados para desnivelar la disputa”, añadió.
Y dejó varias perlas: “El ajedrez es un juego casi infinito. La belleza en este deporte es privativa de los humanos, y es hija del error. Hay combinaciones bellas que castigan el error”. O esta otra: “El ajedrez es un inmenso mar donde un mosquito puede beber y un elefante puede bañarse”.
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