Libertad provisional para los dos hombres acusados de intento de secuestro

El Juzgado de guardia se ha inhibido al Juzgado de Violencia de género de Jaén, que será el que determine los delitos a investigar

El Juzgado de Instrucción número dos de Jaén, en funciones de guardia, decretó ayer la libertad provisional para las dos personas detenidas por el intento se secuestro de una mujer en Peñamefécit. Como medidas cautelares, el juez ha decretado la prohibición de acercarse a menos de 500 metros a la víctima así como comunicarse por cualquier medio con ella. El Juzgado se ha inhibido al Juzgado de Violencia de género de Jaén, que será el que determine los delitos a investigar.

Los hechos ocurrieron el pasado jueves por la mañana. Agentes de la Policía Local detuvieron a dos hombres, nacidos respectivamente en 1988 y 1975, por su supuesta implicación en los delitos de agresión e intento de detención ilegal a una mujer, nacida en 1976. Los arrestos se practicaron en torno a las 9.00 horas en un paraje de difícil acceso, en las inmediaciones de la Carretera de las Cuevas y la Autovía del Olivar.

Los policías locales habían recibido el aviso, por parte de la Policía Nacional, de la huida de dos individuos que se desplazaban en un todocamino, tras verse estos involucrados en los hechos anteriormente mencionados, ocurridos, a las 7.10 horas, en el barrio de Peñamefécit. Estos, según los primeros indicios, se habrían desplazado desde la provincia de Sevilla para secuestrar a la mujer, ex pareja de uno de ellos, por lo que, habrá que aclarar si se trata de un delito de violencia de género.

En cuanto a la detención de los supuestos autores, fue posible cuando los funcionarios de la Jefatura de la Policía Local, en concreto, cuatro agentes que se desplazaron en dos patrullas, tras realizar varias batidas, dieron con el vehículo. Este, por encontrarse en una zona angosta, no era accesible desde el coche patrulla. Por ello, ya pie, y provistos de su arma reglamentaria, ante el aviso de que los dos sospechosos eran peligrosos y podrían encontrarse armados, se identificaron como policías locales y pidieron a los ocupantes del todoterreno que salieran con las manos en alto. Estos, lejos de atender la orden, trataron de huir, aunque, finalmente, los dos policías locales lograron detenerlos.  

Para lograr la detención de los dos sospechosos, además del aviso de la Policía Nacional, fue clave el papel de un agente de la Guardia Civil que, a pesar de encontrarse fuera de servicio, logró impedir la retención contra su voluntad de la mujer que pretendían consumar los dos arrestados. De hecho, además de proteger a la víctima, consiguió aportar descripción precisa del vehículo y su matrícula, lo que facilitó la rápida localización.