'Príncipes y vampiros' conquista a una legión de lectores

La primera novela de la escritora pealeña Rosario Medel genera un interés multitudinario que la sitúa ya en su quinta edición, toda una sorpresa para la autora 

Un libro "rápido, ágil y sensible", o al menos así define Rosario Medel Díaz (Peal de Becerro, 1970) su primera publicación, Príncipes y vampiros, "sorprendida" por el éxito de una ópera prima que acaba de alcanzar su quinta edición, privilegio reservado solo a los best seller: "Cuando lo escribí lo llevé a una fundación cultural a ver si me lo subvencionaban, me dijeron que sí y ya con eso salí contenta, cumplía todas mis expectativas; era una inquietud, pero me sorprende enormemente ver cómo se vende, tiene unos cinco mil lectores ya", celebra la pealeña.

Cruzado temáticamente por un asunto tan de actualidad como la violencia de género incluso en estos días de confinamiento a cuenta del coronavirus, Medel reflexiona: "Lo leen más las mujeres; yo intento que llegue también a los señores, lo he escrito para el mundo. Aunque sea un libro sobre la violencia de género, no es mi idea criminalizar al hombre, sino poner de manifiesto unas historias".

¿El secreto de su éxito?: eso nunca se sabe, pero la escritora lo achaca a un estilo personal "diferente": "No sé si mejor o peor, me escribe la gente diciendo que no han leído nada igual", confiesa, sin vanidad alguna. Sí, sus palabras traslucen sinceridad, no va de diva de la literatura por más que las ventas de su ópera prima se lo permitan. Si lo dice es porque se lo han dicho, y hay quien asegura que no hay mejor crítica que el boca a boca: "Tiene una trama que engancha y con un lenguaje que agrada a mucho tipo de público". 

A saber: "Son historias de pura ficción, aunque noveladas y apoyadas sobre una realidad, en las entrevistas que he realizado a muchas mujeres. El libro recoge diferentes historias, pero la violencia de género como tal solo afecta a la última. El resto son relaciones tóxicas con las que cualquiera puede sentirse identificado". Acaso radique ahí la fortuna de Príncipes y vampiros, con el que su autora pretende "sensibilizar" pero, eso sí, sin recrearse en lo crudo, en el "gore": "Tiene un mensaje positivo, de optimismo, de mujeres que lo superan". 

Sea como sea, el boom que ha supuesto su publicación la anima a poner en los escaparates (físicos y on-line) una segunda obra: "Al principio no, pero ya sí tengo un croquis mental; estoy animada, aunque los momentos profesionales complicados que he vivido por un traslado de administración me han impedido centrarme", aclara la abogada, que en la actualidad desarrolla su labor profesional en el Ayuntamiento de Linares. 

Avalada está, desde luego, por una legión de lectores que si vuelven a apostar por la prosa de Medel la situarán en una de las muchas cumbres que la literatura pone a los pies de las plumas de calidad, como la que manejaba con maestría de clásico el poeta Manrique, hecho ya estatua en las cimas segureñas que también conoce la escritora de Príncipes y vampiros.