Lince atropellado en Mancha Real
Se trataba de una hembra adulta radiomarcada de la población de Andújar y que desde hace poco más de un año se encontraba en dispersión senil
El pasado lunes 16 de octubre técnicos de la Junta de Andalucía, adscritos al Proyecto Life+IBERLINCE, recibieron el aviso de la presencia de un cadáver de lince ibérico en el punto kilométrico 30,800 de la A-316, en el término municipal de Mancha Real. Se trataba de una hembra adulta radiomarcada, de la población de Andújar, y que desde hace poco más de un año se encontraba en dispersión senil.
El cadáver fue trasladado al Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de la Junta de Andalucía (CAD) donde se le practicara la necropsia. Desde Iberlince recuerdan la importancia de dar aviso al 112 ante hallazgo de un lince ibérico muerto, lo cual permite activar el protocolo de levantamiento de cadáver de forma temprana, esencial para obtener la máxima información posible sobre la causa de la muerte.
Por su parte, la organización ecologista WWF España alerta que 2017 ya es el peor año para el lince ibérico, con un total de 33 muertes, a la que hay que sumar esta nueva. La recuperación del lince no está en peligro, ya que el último censo (2016) arroja unas cifras de 475 linces y se espera que el de este año supere los 500. Sin embargo, el alto número de linces muertos en lo que llevamos de año está disparando las alarmas. "Lamentamos que los atropellos sigan siendo la primera causa de mortalidad no natural del lince ibérico, con un total de 21 sobre 33", alerta la organización.
Además, la mayoría de estos atropellos ocurren en varios puntos negros señalados en la campaña ‘Ni un lince más atropellado’. En concreto, de los 12 linces muertos por atropello en Andalucía, 8 han muerto en tres puntos situados en la A-IV, la N-420 y la A-301, las dos primeras de competencia estatal. Lo mismo ocurre en Castilla-La Mancha, donde han sido atropellados 7 linces, 3 de ellos en una única carretera.
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