Inversión de más de tres millones de euros para que la Academia de Baeza sea más ecológica

El objetivo es que la academia logre un ahorro en emisiones de CO2 y del consumo de energía final superior al 30%

El cuidado al medio ambiente debe imperar en todas las instalaciones de las administraciones. De ahí que se haya aprobado una inversión de 3,5 millones de euros para que la Academia de Guardias y Suboficiales de Baeza logre un ahorro en emisiones de CO2 y del consumo de energía final superior al 30%.

Así lo ha anunciado el Ayuntamiento de la ciudad Patrimonio de la Humanidad, que explica que la primera fase de este proyecto será sustituir los desfasados tubos fluorescentes, las lámparas y farolas de vapor de sodio, vapor de mercurio y halogenuros metálicos por 367 luminarias de tecnología led.

El principal objetivo de la Administración General del Estado es promover la sostenibilidad ambiental y la lucha contra el cambio climático. La licitación para cambiar la luminaria exterior cuenta con un presupuesto de 150.000 euros, mientras que para interior es de 350.000. Para puertas y ventanas se destinará un millón y medio de euros, tres partidas que ya están en marcha y que fueron anunciadas en el Boletín Oficial del Estado del pasado 17 de agosto.

El origen de la Academia se remonta a septiembre de 1945 como Séptima Academia Regional de Úbeda. En aquella época la Dirección General de la Guardia Civil se planteó la necesidad de crear unos centros de formación adecuados para dar una respuesta a las necesidades policiales del momento. En una coyuntura económica muy desfavorable, se hizo un enorme esfuerzo para desplegar ocho academias regionales, pues a la de Úbeda le acompañaron las ya ubicadas en Madrid, Málaga, Sabadell, Fuenterrabía, Torrelavega y Santiago de Compostela, que habían nacido en diciembre de 1943, a las que se unió la ubetense y la de El Escorial en 1945.

Suponía una gran novedad respecto a la formación que antaño se proporcionaba en los Puestos del Cuerpo, exceptuando el Colegio de Guardias Jóvenes, cuya existencia es anterior. Por motivos económicos las academias regionales quedaron reducidas un año después, en 1946, a cuatro: Primera, con sede en Madrid; Segunda, en El Escorial; Tercera, en Sabadell y la cuarta, en Úbeda.

Posteriormente se hizo necesario que se continuaran utilizando unidades operativas como complementos formativos, y así se integraron en las Comandancias Móviles de Madrid, Sevilla y Barcelona un gran número de nuevos guardias alumnos, al no poder absorber las Academias Regionales la totalidad de los mismos. En 1996 y 1997 los cursos de cabo y de sargento, respectivamente, pasan a Baeza de forma definitiva, desapareciendo la labor docente de las aulas del acuartelamiento de Úbeda.