Luz de farolas en Las Noches de Carnaval

La Comparsa de Jaén destaca con el tipo de farolas jaeneras en su estreno histórico en el Concurso de Agrupaciones Carnavalescas

"Que se convierta en carne y hueso mi frío cuerpo de metal". Ese fue el primer deseo, las primeras palabras, de Las Noches de Carnaval, el proyecto de La Comparsa de Jaén que  ha supuesto el histórico debut en el Teatro Falla gaditano de una agrupación de la capital jiennense. El tipo, señores de gris metálico con farolas en la cabeza —detalle del lagarto de Jaén incluido—, llamó la atención en el pase de preliminares de ayer.

Los hombre de Alberto Rueda estuvieron muy sueltos desde la presentación. No hubo nervios y la sensación que trasladó la comparsa es que el momento había que vivirlo con alegría. Las plazas, símbolo importante en la concepción de la idea, fue el tema del primer pasodoble, que alumbró un vínculo entre Jaén y Cádiz, al tiempo que destacaba a nombres propios de relieve del carnaval, como Antonio Martín y Paco Alba.

El registro viró en el segundo pasodoble, de cariz social, dedicado a una mujer que sufre sola ingresada y que prefiere seguir así antes que salir del hospital y encontrarse sin compañía ni apoyo.

Los cuples, breves, también ahondaron en el leitmotiv de la luz de las farolas en la noche, y hubo tiempo para que los jiennenses bromearan con la rivalidad entre dos gigantes de la comparsa, Antonio Martínez Ares y Juan Carlos Aragón, Goku y Vegeta, respectivamente, según el giro vía Dragon Ball que ahora promueven las trincheras seguidoras de cada comparsista.

Los pocos más de veinte minutos de actuación concluyeron con un popurrí de música melódica y letras que oscilaban entre los problemas sociales y el aire romántico. Cantó Jaén capital por fin en el Falla. Hoy lo celebran los jiennenses en las redes: luz de farolas del Santo Reino.