La madre de Khawla: "¿Por qué han matado a mi hija? Siempre he dicho que fue una trampa"
Hakima Zeroil abunda en la idea de un plan en el crimen de la menor de Alcalá la Real el día en que también se conocen los relatos de las amigas
Hakima Zeroil, madre de Khawla Elhaiba Zeroil, la menor de Alcalá la Real asesinada hace dos años en un arrabal de La Mota, ha roto en lágrimas en la declaración del primer día del juicio contra Nazzaryn N. N., autor confeso de la muerte de la menor de 14 años. "¿Por qué han matado a mi hija? Siempre he dicho que fue una trampa hecha por un grupo de criminales que regalaron a mi niña", ha expresado. El Ministerio Fiscal pide prisión permanente revisable y entiende que hubo violación antes del asesinato con intencionalidad; la defensa pide ocho años por homicidio imprudente y por profanación de cadáver, porque sitúa cronológicamente la agresión sexual después del asesinato. Además, la acusasión cifra en 480.000 euros la indemnización a la familia por el crimen.
A preguntas de la fiscal, la madre ha asegurado que su hija y el acusado no se conocían antes del 15 de febrero de 2022, cuando tuvieron un primer encuentro inicialmente en grupo en casa de una compañera de clase de Khawla. "Mi niña tenía muy buena educación y sacaba muy buenas notas. Fue a casa de esa chica para ayudarla con los estudios", ha recalcado. La acusación particular y la defensa no han hecho preguntas a la mujer, afincada en Alcalá la Real desde hace décadas; sus dos hijos nacieron en la Sierra Sur.
Hakima Zeroil ha especificado que su hija salió del hogar donde también vivía con otro hermano de Khawla —hoy tiene 12 años— a las 17:30 horas. La idea era que regresara a las 20:30 horas. "Cuando eran las 20:45 salí al pasillo con las sandalias, pregunté que dónde estaba la reina de la casa, y cuando no supe nada de ella, mandé a la Guardia Civil su foto y el DNI", ha relatado y es cuando no ha podido con el dolor e incluso ha mirado con impotencia a Nazzaryn, que se ha pasado la sesión recogido sobre sí mismo, con mascarilla y tapándose el rostro cuando ha entrado y ha salido de la sala.
"POBRE KHAWLA, HA VIOLADO A UNA NIÑA DE 14 AÑOS"
El jurado popular, compuesto por nueve personas —cinco hombres y cuatro mujeres— y dos suplentes, también ha escuchado los testimonios de tres chicas que coincidieron, en mayor o menor medida, con Khawla y Nazzaryn el día de los hechos. Las tres jóvenes han aportado sus testimonios por videoconferencias para esclarecer en qué consistía el juego de la asfixía y si ya lo habían hecho antes bajo las indicaciones del acusado. "Te ponías en la pared, y no sé si era que te presionaban fuerte y tenías que respirar hasta perder la conciencia, o algo así", ha descrito una.
La residente en la casa donde inicialmente se produjo la quedada ha relatado que la intención era estar juntas y jugar a Los Sims y que el juego de la asfixia —mostrado por Nazzaryn al resto, porque según ha señalado lo practicaba "desde la adolescencia"— aconteció sin ser el propósito natural del encuentro. "Cuando nos hacíamos los personajes, Nazzaryn dijo algo sobre que Khawla tenía los ojos asiáticos y a él le gustaban. Al rato lo vi con ella sentada sobre sus rodillas y me pareció muy incómodo", ha narrado. "Él era un señor de veintitantos con una niña de 14 años", ha apostillado.
En este sentido, la residente en la vivienda donde quedaron ha comentado que conocía de hace tiempo al acusado por la relación de proximidad con los hermanos. También ha refrendado que tras la muerte de Khawla mandó un mensaje de texto a una amiga que aquel día abandonó el plan para comprar comida para una cobaya: "Todo era verdad. Pobre Khawla. Ha matado a una p*** niña de 14 años".
Igualmente, las jóvenes se enviaron mensajes especulando, con miedo, sobre qué habría pasado si también ellas hubiesen acudido a La Mota, donde finalmente sólo fueron Khawla y Nazzaryn, como él ha confirmado en su declaración asegurando que fue "fortuito" y no premeditado.
LA DIFERENCIA DE ENVERGADURA EN EL MOMENTO DE LA MUERTE
Las tres jóvenes han refrendado la diferencia de envergadura entre la víctima y el asesino confeso, que mantiene que no violó a la menor, pero sí le metió dos dedos en la vagina y la desnudó después de practicarle, siempre según su versión, el juego de la asfixia en el cuello, tras dos intentos frustrados en el pecho cuando estaban en grupo. En cambio, la fiscal narra, en el escrito de conclusiones provisionales, que el detonante del supuesto ataque fue la negativa de Khawla a un beso que intentó darle Nazzaryn.
Entonces, según este relato, "el acusado se abalanzó súbitamente sobre ella y aprovechando su mayor envergadura y fuerza par impedir cualquier posibilidad de movimiento por parte de la menor, se colocó encima de ella a horcajadas apoyando las rodillas en el suelo mientras ella yacía boca arriba y una vez sobre ella inmovilizada, empezó a penetrarla vaginalmente con el pene, con fuerza suficiente para lesionar los tejidos profundo de la región genital".
El texto detalla que Nazzaryn estranguló a Khawla hasta provocarle la muerte por "asfixia mecánica por compresión extrínseca del cuello, manteniendo mientras el acusado la penetración incluso hasta después de la muerte de la menor". El juicio continuará mañana a las 10:00 horas en la Audiencia Provincial. Quedan los testimonios de los agentes de la Guardia Civil y de los forenses, entre otros.
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