Movilizaciones por Jaén

Vaya por delante mi apoyo a las movilizaciones contra el ninguneo a la provincia de Jaén que se están convocando en estos días. Quizá no tanto con el modo en el que se están haciendo, pero, en cualquier caso, indispensables llegados a este punto.

Un apoyo incondicional que se basa en una certeza fundamental, se tenían que haber producido hace mucho tiempo. Y no por el Colce, que no ha sido sino la gota que ha colmado un vaso que ya rebosaba por todos lados, sino por muchos otros ejemplos de menosprecio y abandono que viene sufriendo la provincia de Jaén y su gente. Infraestructuras, servicios, dotaciones, etc. Quizá, seamos sinceros, estamos tan acostumbrados que si la adjudicación del Colce a Córdoba no hubiera sido una maniobra tan burda, igual ni nos estaríamos planteando las movilizaciones ni habría más movimiento del habitual en redes. Y desde luego no se habría convocado una manifestación de ámbito provincial porque aquí, por desgracia, parece que nos duele mucho menos lo que le pasa al vecino que lo que pasa en la otra punta del mundo.

No hay que achacar, en mi opinión, el estado de la provincia ni a unos políticos concretos ni a una decisión concreta. Esta situación no es de ahora y quizá lo que sí deberíamos plantearnos es que hemos tenido unos representantes políticos que han antepuesto su carrera o la de su partido al bienestar y el desarrollo de la provincia y del pueblo al que representaban. Porque, como me decía hace poco una buena amiga, la política es un juego de suma cero y se trata de negociar para poner en un lado de la balanza lo que estamos sacrificando y en el otro lo que vamos consiguiendo a cambio. Y será pasado un tiempo, al hacer balance, cuando veamos si lo conseguido justifica lo perdido. Pero parece evidente que la balanza lleva mucho tiempo volcada hacia un lado y quienes tenían que haber conseguido compensarla no han tenido la capacidad o la valentía para lograrlo, suponiendo que lo hayan intentado. Han preferido en muchos casos el apoyo de sus compañeros antes que el de su ciudadanía.

Pero yo, que recalco que apoyo las movilizaciones, y lo hago porque estoy seguro de que la primera lectura que mucha gente hará de estas líneas será para decir que estoy en contra o que soy un insolidario o cualquier otra cosa, propongo un ejercicio de auto cuestionamiento de lo que hemos hecho personalmente para evitar la situación.

Simplemente como entretenimiento y, si acaso, para reafirmar nuestro apoyo y poder acudir a las movilizaciones con renovadas fuerzas y cargados de razones. ¿Qué hemos hecho todas y cada una de las personas que compartimos la rabia y la indignación de estos días por nuestra provincia en los meses pasados, en los años pasados? Porque esto no es flor de un día, sino que viene de más lejos.

Se me ocurre que como cada cual está en su casa, o en el trabajo, o en un parque, leyendo esto, podríamos jugar a un infantil “Que levante la mano...”

A ver, que levante la mano quien teniendo la posibilidad de comprar en el pequeño comercio de Jaén, se ha ido al 'Nevada' a dejarse los ahorros. Más allá de un primer viaje, por aquello de la curiosidad, tengo entendido que los sábados por la tarde allí había más gente de Jaén que en el Paseo de la Estación. Quien dice el 'Nevada' dice el 'Primark' o algún otro. O, vamos más allá, que levante la mano quien pudiendo favorecer al comercio de cercanía, a veces hasta de su propio barrio, no mira primero a ver si lo que quiere no lo puede pedir desde el sofá por Amazon. Igual hasta hay quien ha mirado en Amazon por si la bandera de Jaén, local o provincial, morada o verde, que tiene colgada en su balcón le podía salir algo más barata.

Que levante la mano quien comparte fotos de su viaje a Asturias y sus maravillosos paisajes, pero ni se preocupa de saber el estado de los ríos de la provincia o, lo que es peor, va alguna vez a algún paraje que a todos se nos ocurren y se “deja olvidada” alguna botella o bolsa de plástico. Al hablar de ríos también pueden meterse ejemplos de pueblos maravillosos, rincones recónditos, amaneceres en calles y plazas, y cualquier otro ejemplo de promoción turística que, aún estando muy bien poder disfrutarlos, no debería suponer el abandono de los más cercanos.

Que levante la mano quien, al menos alguna vez, no ha justificado decisiones políticas que claramente eran desfavorables a Jaén por el simple hecho de que las tomaban “los suyos”. Es cierto, a veces con la nariz tapada, pero se justificaban. Y que nadie mire para el lado, que ahí puede haber ejemplos de todos los colores que han tenido responsabilidades de Gobierno que nos atañen.

Que levante la mano quien teniendo a mano, nunca mejor dicho, la posibilidad de apoyarse en empresas de la zona, ha contratado la obra o reforma de su casa a una empresa de otro sitio, empezando por nuestras mismas instituciones, que deberían valorar en sus pliegos de condiciones el hecho que la empresa que opte a una contrata esté radicada en Jaén y cree empleo y riqueza en la provincia.

En fin, se me hace que esto podría ser muy largo y simplemente os propongo que cada uno lo alargue hasta donde considere oportuno pero, eso sí, solo si después va a poner remedio y va a apoyar, ahora sí, sin fisuras a las personas, a las empresas, a los comercios, a las instituciones, a la cultura, a los acontecimientos,….de nuestra tierra. Sin menospreciar ni desmerecer a nadie pero, sobre todo, nunca a nosotros mismos.

Podemos y debemos exigir una responsabilidad a quienes nos representan o tienen el poder de decidir sobre lo que nos atañe, pero también podemos y debemos exigirnos a nosotros mismos la misma responsabilidad porque además somos los más beneficiados, o perjudicados, del rumbo que tomemos.
Ah, y que conste que estas líneas no las he escrito contra el Nevada, el Primark, Amazon, Asturias, etc... sino a favor de Jaén, de lo mucho que tenemos y que no valoramos. Sobre, en definitiva, lo que de cada una de las personas de esta provincia puede salir para dar la vuelta a la situación de abandono y poner a Jaén en el sitio que le corresponde.