El mundo de la cerámica está "muy vivo"

Profesionales de Úbeda y Bailén analizan el sector tras su participación en la 46 edición de la Feria de la Cerámica y Alfarería Popular celebrada en Zamora

La Alfarería de Jaén ha estado presente en la 46 edición Feria de la Cerámica y Alfarería Popular celebrada en Zamora con motivo de las Fiestas en honor a San Pedro. Una cita que ha contado con un número de 44 alfareros y de 52 ceramistas de toda la geografía española, más algunos artesanos de Portugal. Tal vez por el número y categoría de la muestra, la feria está considerada como de las más importantes del Sur de Europa.

ÚBEDA

Una de las firmas participantes ha sido Cerámica Alameda, de Úbeda. Alberto Alameda explica que pertenece a la octava generación de alfareros-ceramistas y que existen documentos que avalan su firma desde mediados del siglo XVIII. Es la quinta vez que participa en esta muestra. También participa en otras como la de Cantabria, Salamanca, Aranjuez, Valladolid o Almería. Relata que lo que caracteriza a sus piezas es el “calado” que le da una gran originalidad y resalta el papel decorativo. En su muestra ha tenido las piezas claves tradicionales ubetenses, con su color verde, pero con la presencia de más colores, sin olvida la técnica de “cuerda seca” o la de reflejos metálicos. La piezas tradicionales como el jarro de agua o de vino, alcuzas, aguardienteras, tarros, albarelos, platos, alcollas, orzas, morteros, lebrillos, queseras, porrones, han compartido espacio con otras más modernas como las bomboneras, macetas, lapiceros, escudos heráldicos y piezas de un vanguardista diseño.

BAILÉN

Cristóbal Arance pertenece a la tercera generación de alfareros-ceramistas. Ha estado presente en la feria zamorana en 18 ocasiones. También ha participado en cistas de Madrid, Granada, Tarragona, Almería, Asturias. Destaca de sus objetos su tradicional diseño y el color que aumentan su valor decorativo. No puede faltar el cántaro típico de Bailén, el jarro de culo ancho, que es una alcuza para el aceite, o las orzas,   y una gran variedad de tarros de cocina, platos, fuentes, artículos de jardinería más otras piezas demandadas por su funcionalidad moderna.

Ambos profesionales reconocen que la alfarería y la cerámica está "muy viva en el mundo actual" y buena muestra de ello es esta feria zamorana.