Munuera Montero sostiene que su empresa no ha facturado a entidades deportivas

El árbitro jiennense avisa que ejercerá acciones civiles y penales contra quienes difundan "falsedades o informaciones incorrectas o sesgadas"
José Luis Munuera Montero, árbitro jiennense en Primera División, ha salido al paso de las informaciones que señalan un conflicto de intereses entre sus funciones en LaLiga y la empresa Talentus Sports Speakers, participada por el colegiado. El Comité de Cumplimiento de la Federación investiga el caso y de momento el jiennense no pitará este fin de semana.
"Esta empresa no ha facturado desde su creación ninguna cantidad a entidad deportiva alguna, ya sean clubes, federaciones o empresas de la industria del deporte", expresa Munuera Montero en un comunicado hecho público en redes sociales por el propio referí.
El portal de LinkedIn Talentus Sports Recruitment se dedica, según explica el colegiado, a "dar un valor añadido" a los potenciales asistentes de las charlas, mayoritariamente jóvenes postuniversitarios en busca de su primera oportunidad profesional, dando a conocer "las numerosas ofertas de empleo publicadas en la citada red social.
El jiennnese remarca que la firma empezó su actividad hace menos de un año y que todos los casos que ha hecho hasta la presente son "sin contraprestación por parte de las empresa, clubes u organizaciones". "Ni siquiera han sido contactadas ni han recibido ningún tipo de planteamiento comercial", expone.
"Ejercitaré las acciones civiles y penales correspondientes contra aquellos medios que de manera intencionada o temeraria han difundido falsedades o informacciones incorrectas o sesgadas generando un irreparable perjucio en el prestigio profesional, reputación propia y del colectivo arbitral, así como en la intimidad personal propia y de terceras personas", sentencia.
CRÍTICAS TRAS SU ÚLTIMO PARTIDO
Munuera Montero ha sido objeto de críticas, fundamentalmente de una parte de la prensa deportiva, tras dirigir el encuentro en El Sadar que enfrentó a Osasuna contra el Real Madrid, correspondiente a la jornada 24 de LaLiga.
La expulsión de Jude Bellingham fue una de las acciones polémicas del partido y la discordia se dio en la literalidad de las palabras del mediocampista blanco: el colegiado las interpretó como un insulto, mientras que el jugador defendió, en rueda de prensa, que sólo fue una expresión de desahogo sin intención de ofender.
"En estos últimos meses ha quedado evidenciado el ataque desmesurado hacia el colectivo arbitral, en esta última ocasión siendo yo el protagonista", manifiesta el árbitro en el texto difundido.
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