“Nos faltan manos para dar comida”

La vocalía de Apoyo Social de Ciudadanos por Jaén pide más colaboración para asistir a cerca de 200 familias cada mes

SOS de la vocalía de Apoyo Social de ‘Ciudadanos por Jaén’: “Nos faltan manos para dar comida”. Así lo traslada Lola Lizcano, responsable del área, en declaraciones a este medio. La federación acaba de auxiliar a cerca de 200 familias, unas 300 personas. Son los registros habituales de cada mes. Y los que ayudan piden ahora ayuda.

El último reparto celebrado en el almacén que el colectivo tiene en la calle Juanito Valderrama fue el martes. La cifra de asistidos osciló entre los 280 y los 300, según la federación. “Y no vino más gente porque algunos encuentran trabajo y no pueden asistir”, señala.

DIEZ COLABORADORES FIJOS Y CARENCIAS EN EL ALMACÉN

La federación no baja la guardia, sólo que necesita que el grupo de colaboradores crezca. Los fijos son una decena. “El día que hay que descargar el camión y preparar los lotes sí que la gente se conciencia y nos brinda su ayuda”, cuenta. Pero el resto del mes, cuando hay que coordinar las entregas con el Banco de Alimentos, organizar debidamente el papeleo de los auxiliados y cuidar los detalles, el grupo se ve “desbordado”, falto de manos.

Las necesidades alimenticias continúan. La Merced, el Almendral, San Felipe, la Glorieta, la Magdalena y Antonio Díaz son los barrios con más urgencias.

El almacén donde se realizan los repartos, el lugar al que acude la gente para llevarse la comida, tiene carencias. La ventilación, por ejemplo. No hay ventanas. Tampoco luz, porque ‘Ciudadanos por Jaén’ no tiene recursos para pagar esos gastos. “A veces estamos a oscuras. Y en el verano, con el calor, ha sido duro tanto para nosotros como para las personas que venían a por la comida”, señala la responsable de la vocalía.

Los datos no invitan al optimismo. El hambre no es mayor en Jaén porque hay labores altruistas como la de la federación, cada vez más limitada. Reconvertida casi en una oenegé.