Operación 'Lareira': un golpe contra el tabaco ilegal que nace en Jaén y Córdoba

La operación de la Guardia Civil ha sido llevada a cabo por las comandancias de Jaén y Córdoba y de los tres investigados de España uno procede de Jaén

Componentes de las Unidades de Policía Judicial de las Comandancias de la Guardia Civil de Jaén y Córdoba, en colaboración con la Unidad de Acción Fiscal (UAF), a través del Destacamento de Coimbra (Portugal), y con el apoyo operativo de Europol, pusieron en marcha la operación 'Lareira'. El objetivo era desmantelar estructuras dedicadas a la producción y comercialización ilícita de productos del tabaco. La operación ha finalizado con la acusación de 10 ciudadanos portugueses y la investigación de 3 españoles, uno de Jaén, según ha podido saber este periódico, además de la aprehensión de más de 10 toneladas de tabaco picado, alrededor de un millón de cigarrillos listos para la venta y diversas máquinas de producción y envasado.

La investigación ha sido desarrollada durante dos años, con el objetivo de investigar una organización criminal internacional que presuntamente se dedicaba a la introducción y comercialización fraudulenta de diversos productos del tabaco. Al parecer, controlaban un circuito de producción, distribución y comercialización en el territorio nacional y en Portugal. 

Según informa la Guardia Civil en un comunicado, la organización contaba con un complejo esquema de producción, el cual además del envasado y comercialización, trataban de ocultar, tanto el contenido de los envíos, como las direcciones de los destinatarios y remitentes.

Durante la investigación, se realizaron 25 registros en Portugal, de los cuales 14 fueron en domicilios y 11 en establecimientos comerciales. Concretamente, fueron en los distritos de Viana do Castelo, Oporto y Braga, Se llevaron a cabo 9 registros en las provincias de Jaén, Córdoba y Sevilla.

Con esta operación han sido intervenidos 144.000,00 euros en efectivo, más de 10.000 kilos de productos del tabaco, alrededor de un millón de cigarrillos, 12 máquinas utilizadas en la producción y empaquetado de productos de tabaco, más de 300.000 cajetillas de cartón impresas, con diferentes marcas de cigarrillos, varios modelos de impresión de tarjetas, con imágenes referentes a diferentes marcas comercializadoras de tabaco, 4 kilogramos de cananbis, diez vehículos, 3 balanzas, un arma de fuego con munición, y varios soportes informáticos que están siendo analizados.

Se calcula que la organización ha comercializado productos del tabaco, entre Portugal y España, por un importe aproximado de 5,9 millones de euros, lo que supone un fraude, de más de 5,96 millones de euros en concepto de impuestos.