'¡The Melocotons a la fama!': el Paco Ortega más didáctico

El artista ubetense, obligado a aplazar el festival Flamencos y Mestizos por el coronavirus, reedita un libro que es ya un clásico para aprendices de productor musical 

Cantante, compositor, músico, productor, escritor... y de Úbeda. Sí, Paco Ortega es la piel, la estatura, el rostro de un espíritu del Renacimiento cuyas manos no dejan de crear, lo mismo a la guitarra que en una mesa de grabación o con el bolígrafo desencapuchado como un nazareno díscolo.

En pleno y endurecido estado de alarma por el Covid-19, el artista tiene motivos para la alegría a la par que para la inquietud, por más que una conversación con él deje clara su apuesta por lo primero. Sí, el coronavirus, que tantas cosas se está llevando por delante, impide también que el próximo día 16 de abril la ciudad Patrimonio de la Humanidad se convierta en la capital jonda de la mezcla, como estaba previsto. 

"Hemos tenido que aplazar el Festival Flamencos y Mestizos, la gente va a tener mucho miedo, así que retomaremos a partir de la segunda semana de junio o por ahí. En principio hemos aplazado a todos los artistas, no hemos anulado a nadie, les hemos prometido una nueva fecha", aclara Ortega. Un cartelazo y un montón de actividades complementarias prometían cultura a manos llenas, música grande y talento a espuertas desde mediados de abril hasta la primera semana de mayo; merece la pena esperar un mes más, o lo que se tercie.

¡THE MELOCOTONS A LA FAMA!

Malos ratos al margen, el ubetense está de enhorabuena. Creativo hasta la médula, la literatura forma parte también de su repertorio expresivo y, vistos los resultados, 'suena' bien lo que hace. Ahí está la reedición de su libro ¡The Melocotons a la fama!, cuya primera edición, de 2011, se agotó rápidamente y que es ya todo un clásico para los aprendices de productor musical. 

"Es un manual sobre todo lo que hay que saber de la industria discográfica, que para hacerlo ameno escribí a través de un relato juvenil; la primera edición en papel se acabó enseguida y ahora lo acabo de editar como libro electrónico, para que la gente lo pueda descargar", dice el autor. 

Machadiano en su vocación didáctica, Paco Ortega vuelca en esas páginas la experiencia acumulada durante décadas, la misma que lo ha llevado a ser un referente en lo suyo. "En cuestiones de cultura y de saber, sólo se pierde lo que se guarda; sólo se gana lo que se da", pensaba el poeta sevillano, tan unido a las tierras de La Loma:

"Este libro lo hice como respuesta a toda la gente que viene a verme y me dice: 'Estoy un poco perdido, ¿qué tengo que hacer?, no sé cómo va esto"; confunden los derechos de autor con los de intérprete, no saben lo que es un productor, un contrato, qué es el mastering... Todo eso queda completamente explicado a través de una historia. Y, además, lo bueno que tiene es que también incluye el disco del grupo que graba en la historia, al final del libro hay un apartado que son las canciones del disco que han grabado, que no solo se ven sino que se escuchan también".

Y es que lo de producir, grabar, editar un disco, moverse en ese mundo no se enseña en la Universidad (o no del todo): se aprende, en palabras del de Úbeda, a pie de mesa, echándole horas: "Hay un grado que va a desaparecer, de cuatro años, sobre producción musical, pero con aspectos que no contemplaba, porque toda la parte práctica y de producción artística, realmente, es muy complicado. Hay muchas cosas que efectivamente se aprenden en este libro y que es muy complejo aprenderlas estudiando", asegura. 

Sabe de lo que habla y, por lo tanto, de lo que escribe. Cuando él empezó, no encontró manuales como el que ha querido legar a las nuevas generaciones de productores; su 'escuela' fue empaparse de lo que hacían otros grandes, oír, ver, callar y llenar ese silencio de recursos, de conocimiento, de experiencia. La misma que lo tiene ahora enfrascado en un nuevo proyecto editorial, Los secretos del productor: "No sé cuándo lo terminaré pero será un libro my divertido, con ciento cuatro secretos, simplemente pequeños trucos de oficio, que la gente que tiene un 'home estudio' puede aprender con y ganará muchísimo tiempo, evitará muchos errores", concluye.