Un barrio que se cae a pedazos

La caída parcial de un muro en la calle Soria de San Juan vuelve a soliviantar a los vecinos de Torre del Concejo, cuyo presidente expresa su indignación ante el galopante deterioro de la zona

El casco antiguo de Jaén languidece con el paso del tiempo a pesar de los reiterados anuncios de las distintas administraciones por preservarlo y reactivarlo. Iniciativas que son papel mojado. No hay semana en la que los vecinos se lleven un buen susto por algún motivo. El pasado día 13 parte de la fachada y del techo en una vivienda de la calle Elvín se vino abajo sin causar por fortuna heridos. Y hace solo dos días el muro de un solar abandonado se desprendió también parcialmente. No se produjeron daños personales, pero la Policía Local y Bomberos se han visto obligados a intervenir para asegurar la zona ante el riesgo de un nuevo derrumbe.

Es un episodio más del estado de abandono que sufren determinadas calles del barrio de San Juan, cuyo presidente, Francisco Jesús Castro, no oculta su indignación y pesar por una situación que ya pasa de "castaño a oscuro". "Ese muro llevaba tiempo y se avisó al concejal de Mantenimiento Urbano. Es un solar municipal al que no se le presta atención alguna", denuncia el responsable de la Asociación de Vecinos Torre del Concejo. "La situación de degradación es vergonzante", añade.

Inseguridad ciudadana por la escasez de presencia policial, falta de limpieza, caos de tráfico, falta de aparcamientos e instalaciones deportivas o la formación de guetos en el casco antiguo son otras cuestiones denunciadas por Francisco Jesús Castro.

El responsable vecinal, que hace un año convocó hasta dos movilizaciones por la situación de infravivienda de la calle Alegría, también por el derrumbe de un inmueble, no parará hasta que las autoridades pongan en marcha medidas hacia la rehabilitación y recuperación de este barrio, además de "presionar a cuantas instituciones públicas y privadas estén implicadas directa e indirectamente en la recuperación del casco antiguo". De hecho, su siguiente paso será recurrir de nuevo a la Junta de Andalucía para que, de una vez por todas, se atienda las necesidades de las familias. "Lo que no pienso permitir es el hundimiento de mi barrio".