El Ayuntamiento de Úbeda arrienda el Palacio Marqués de Mancera
El contrato de arrendamiento, con 12.000 euros al mes de alquiler, del Palacio Marqués de Mancera tiene derecho a compra e incluye el desalojo del inmueble a finales de 2019
La Alcaldía del Ayuntamiento de Úbeda ha acogido la firma del documento de contrato de arrendamiento, con opción a compra, del Palacio Marqués de Mancera, situado en la calle Soledad Torres Acosta número. La rúbrica ha corrido a cargo de la Superiora Provincial de la Congregación de Religiosas Siervas de María Ministras de los Enfermos, Encarnación Rodríguez, y de la alcaldesa de Úbeda, Antonia Olivares.
El alquiler se ha fijado en 12.000 euros mensuales, cantidad que se irá descontando del precio de compra, aproximadamente 1,7 millones de euros, una vez se adquiera el edificio en los próximos años, si el Ayuntamiento puede asumirlo económicamente.
La regidora local ha matizado que el documento firmado es en régimen de alquiler, con opción a compra. La intención era adquirir en propiedad este inmueble, pero el Ayuntamiento ha tenido que hacer frente en esta anualidad, por sentencia judicial al préstamo para pagar los terrenos a la Renault, de más de 3.000.000 euros, “lo que ha impedido que podamos hacer frente a la compra del Palacio”. En este sentido, la alcaldesa ha matizado que esa sentencia no la causó este equipo de gobierno, sino que se generó durante el mandato de 2011/2015, pero es ahora cuando se ha tenido que asumir.
La intervención obliga al desalojo completo del mismo a finales de 2019 por varios motivos. El primero para evitar algún peligro a los usuarios y trabajadores del Ayuntamiento, y, el segundo, responde a que la ejecución de las obras obliga a la evacuación total de las oficinas y despachos existentes.
EL 1,5% CULTURAL
Como ha manifestado la regidora local, el alquiler temporal del palacio responde a la necesidad de ubicar, provisionalmente, los servicios administrativos que actualmente operan en el Palacio Vázquez de Molina, como consecuencia de las próximas obras que se acometerán para restaurar y adecuar el inmueble que actualmente es sede del Ayuntamiento ubetense. Y es que, como ha adelantado Olivares, las obras tendrán una previsión de duración de tres años, finalizando en 2022.
La alcaldesa ha recordado que el Ayuntamiento de Úbeda es beneficiario de los fondos concedidos en la última convocatoria del Ministerio de Fomento con cargo al 1,5% Cultural, para proceder al inicio de la primera fase de rehabilitación de cubiertas, estructuras e instalaciones del Palacio Vázquez de Molina. Así, con esta actuación se pretende solucionar problemas estructurales graves y que, por motivos de seguridad, han obligado a cerrar varias alas del edificio.
La Superiora Provincial de la Congregación de las Siervas de María Ministras de los Enfermos ha reconocido que tenían unos vínculos muy estrechos con la ciudad, pero al no haber vocaciones tuvieron que cerrar la comunidad en Úbeda. “Desde entonces la casa ha sido un peso, porque, por desgracia, sabíamos que la casa no la íbamos a volver a habitar nosotras”, ha confesado.
Por esa razón, la preocupación era la salida que se le iba a dar al inmueble y, como ha reconocido la Superiora Encarnación Rodríguez, es una “satisfacción” que quede en manos del Ayuntamiento y que sea la ciudad, y no un particular, la que se quede con ella.
EL INMUEBLE
El Palacio Marqués de Mancera está situado a escasos metros del Palacio Vázquez de Molina, tiene rango de edificio histórico y forma parte del conjunto histórico-monumental, en plena zona de Valor Universal Excepcional (VUE), declarada así por la UNESCO en 2003.
En cuanto a su historia, el edificio posiblemente data de finales del siglo XVI. Fue mandado a construir por los hermanos canónigos de la Colegial de Santa María, Antonio y Lope de Molina Valenzuela, al arquitecto renacentista Andrés de Vandelvira.
Posteriormente, este alcázar urbano, fue propiedad de uno de los hombres más ricos del país, Pedro Álvarez de Toledo y Leiva, primer marqués de Mancera, título del cual el Palacio recibe su nombre, y virrey del Perú.
Será en 1900 cuando la Congregación Siervas de María se instala en esta propiedad en el edificio, para utilizarlo como convento y para servir a Úbeda en la asistencia de pobres y enfermos de manera gratuita durante el siglo XX. Es en el 2006 cuando la Congregación deja el inmueble.
En cuanto a la división de edificio, el mismo consta de: planta baja, primera planta, segunda planta, tercera planta, cantina abovedada y patios. Respecto a su superficie, toda la construcción suma 3.292 m2 y 780 m2 de patios.
Actualmente, el edificio está vacío y se encuentra catalogado en grado 2º por el Catálogo de Edificaciones y Espacios del Plan Especial del Centro Histórico de Úbeda (PEPCH).
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