"Los panaderos tradicionales estamos peor que hace un año"
La Asociación Provincial de Fabricantes y Expendedores de Pan lamenta el cierre de más hornos en la provincia
Once de la mañana del 17 de octubre. En la Lonja de la Diputación hay decenas de jiennenses curioseando o haciendo fila en los stands habilitados para impulsar a la Asociación Provincial de Fabricantes y Expendedores de Pan, Apfepan. Nadie discute el atractivo de la muestra; otra cosa es la realidad del sector, minado por las circunstancias, en particular por la inflación de la materia prima.
—Los panaderos tradicionales estamos peor que hace un año —admite en declaraciones a este periódico José Antonio García, presidente del colectivo, y recuerda el SOS que lanzó en el mismo lugar en 2022.
García hace un aparte en una mañana con afluencia —también se presenta el Festival de Música Antigua de Úbeda y Baeza— para atender a este medio. En su forma de hacer conviven las ganas por dar músculo al acto de la Diputación con un diagnóstico nada halagüeño:
—Seguimos peor, porque prácticamente no se han dado cambios.
La cronología que traza el presidente de Apfepan muestra un viraje: el sector fue considerado esencial cuando irrumpió la pandemia del Covid-19 y pudo recibir ayudas; con la invasión rusa en Ucrania no han podido acceder a bonificaciones para la electricidad.
Asegura García que los hornos en la provincia siguen cerrando y que ya hay menos de 400. En la muestra celebrada tras el Día Mundial Pan, que es sólo para degustación, han participado empresas de Jaén, Cazorla y Linares.
Las colas de gente tienen algo de efecto óptico. Porque el producto se vende, pero la ganancia (otra vez) cada vez es menor.
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