Jaén alza la bandera del olivar pura sangre
Unos 4.500 agricultores colapsan el centro de Jaén en la primera de las movilizaciones para luchar por el olivar tradicional y unos precios justos
"El futuro del aceite de oliva está en nuestras manos"
Juan Justicia Gómez es de Bélmez de la Moraleda. Está en primera fila, delante de la pancarta y todavía queda media hora para que el reloj marque las once de la mañana. ¿Por qué hay que estar hoy aquí?
—Están los precios por los suelos.
Que aún deberían ser más es lo que siente este olivarero, uno de los 6.000, según la organización, 4.500 de acuerdo con los datos de la Policía Nacional, que se han citado frente a la Subdelegación del Gobierno para ver nacer el "espíritu de las batallas".
—Es una pena que el olivar de Jaén esté en unos niveles que ya es imposible costearse.
El de hoy es el primer paso de un camino que se presume largo; de una andadura para defender el olivar pura sangre, el tradicional, el centenario, el que fija la población al terreno, el que genera empleo y el que es inyección económica. Es el primer día de una batalla por el aceite picual que tanto caracteriza al mar de olivos, el "pura sangre", el que es salud.
'Andaluces de Jaén, aceituneros altivos' sonaba de fondo en la Plaza de las Batallas mientras los bares del Paseo de la Estación respiraban olor, sabor y alma de campo. Algunos manifestantes desayunaban mientras una riada de personas bajaba desde la Plaza de la Libertad. A las once, según los cálculos de la Policía Nacional, ya eran 3.000 los congregados y no paraban de llegar autobuses cargados de voces que han rugido por el olivar tradicional.
A pesar de que se han dado momentos de tensión entre los manifestantes y la Policía Nacional y las complicaciones de organización, lo cierto es que la convocatoria ha sido un cántico a la unión. Lo han demostrado las organizaciones convocantes, Cooperativas Agro-alimentarias, Infaoliva y las organizaciones agrarias ASAJA, COAG y UPA, respaldadas por UGT, CCOO, alcaldes, políticos y compañeros llegados de Sevilla, Córdoba, Cádiz y otros puntos de la geografía española. Hasta 'Los Manolos', del programa de Pekin Express, estaban allí en la primera gran concentración de un calendario más amplio de movilizaciones y de interlocución con las administraciones con el que los colectivos agrarios, de industriales y de cooperativistas pretenden trabajar, todos juntos, para poner en marcha los mecanismos y las medidas necesarias para que haya una estabilidad en el mercado.
Y ya se han puesto las bases de futuro porque el sector coincide en salir a la calle después de comprobar que, pasado un margen de tiempo prudente, la situación persiste y no se toman las medidas oportunas por las administraciones. Recuerdan que el precio del aceite comenzó a caer a partir de primeros de marzo de 2018 y que, desde entonces, no ha remontado, comprometiendo los márgenes de estabilidad de los olivareros ya que, según diferentes estudios, los costes de producción se sitúan en los 2,70 euros por litro de aceite. Lo ha defendido mientras coreaban "Estamos contigo", "Manos arriba, esto es un atraco" o "El pueblo unido, jamás será vencido".
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