Radiografía de una lenta agonía
El documental 'Perdiendo el tren', que se estrena mañana en la Delegación de Educación, repasa la historia del ferrocarril en la provincia desde su apogeo hasta su casi total desmantelamiento
Dicen los más viejos del lugar que hubo un día en el que la actividad en la Estación de Linares-Baeza era tan frenética que cada cinco minutos uno podía coger tren con destino a cualquier parte de España. De aquel principal nudo ferroviario que conectaba la Meseta con el Sur, solo queda un entramado de vías muertas y naves destartaladas. La llegada del AVE y la reordenación de rutas de media distancia del Ministerio de Fomento acabó con una historia que se remonta al último cuarto del siglo XIX, cuando Linares llegó a contar con cuatro estaciones en su casco urbano (Madrid, Almería, La Zarzuela y La Carolina y prolongaciones), que la convertían en una capital ferroviaria, hoy olvidada, como el resto de la provincia, por las administraciones de todos los signos políticos.
Jesús Luque y Pablo Flores han recogido en el documental 'Perdiendo el tren', que se estrena mañana en la Delegación de Educación a partir de las ocho y media de la tarde, el apogeo y casi el total desmantelamiento del ferrocarril en la provincia jiennense, donde prevalece un paisaje de estaciones abandonadas o derruidas y kilómetros y kilómetros de raíles sin uso. "Hace treinta años que comenzó el cierre de líneas, con lo que la provincia ha asistido, sin prisa pero sin pausa, a la pérdida de circulaciones y a la reducción sistemática de trenes", asegura el director y guionista de esta crónica de una muerte anunciada. Su objetivo no es otro que acercar hasta el espectador "la realidad histórica de esta infraestructura que es clave en el desarrollo de cualquier región" y en este trabajo audiovisual "se podrán contemplar testimonios de la importancia que tuvo el conocido Tren del Aceite que circuló a principios del pasado siglo o de como Linares llegó a convertirse en la capital ferroviaria del sur de España".
Pablo Flores, cámara en mano, ha visitado varios puntos de la provincia, otrora actores protagonistas de la historia del ferrocarril, para entrevistar a personas que conocen en profundidad las causas por las que Jaén se han convertido en una isla apartada del mapa ferroviario español. Y una de las razones más importantes que llevaron a ese descarrilamiento fue la entrada en servicio de la Alta Velocidad que benefició a zona occidental de Andalucía en detrimento de la Oriental. Fue la puntilla para Jaén, Granada y Almería.
IMÁGENES DEL ABANDONO
A estas alturas del año, el color que predomina a lo largo de los kilómetros de recuerdo ferroviario no es precisamente el verde, sino el amarillo de los pastos desatados, sin desbrozar, interrumpido cada poco por algún arbusto que surge entre traviesa y traviesa. Es la imagen del abandono, especialmente evidente, en los alrededores de estaciones como la de Martos y otras muchas.
Falta de planificación, centralismo del modelo radial, abandono durante distintos gobiernos, la trayectoria del ferrocarril en Jaén está lejos de ser una vía recta, sino más bien un zigzag entre intereses económicos, brechas territoriales y políticas cortoplacistas. Jesús Luque trata de analizar todas estas cuestiones en los tres episodios en los que se divide el documental que el sábado, a las siete de la tarde, llegará al salón de actos del Ayuntamiento de la Estación Linares-Baeza.
El proyecto cuenta con el apoyo de Foco Henri Langlois y de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, que desde el primer momento se volcaron con una iniciativa que pretende arrojar luz sobre la realidad de "cómo Jaén sigue perdiendo el tren del desarrollo e infraestructuras". "El resultado ha sido un trabajo brillante y serio que es inédito en nuestra provincia y que va a ayudar a comprender más y mejor la gravedad del desmantelamiento del tren en Jaén", asegura Jesús Luque, quien solo tiene palabras de agradecimiento para el equipo doce de personas de diversos ámbitos que han trabajado de manera desinteresada para que este documental sea una realidad.
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