La provincia registra una docena de temblores en el último mes

Los microterremotos de mayor magnitud se han dado en Lopera y Peal de Becerro, donde se han alcanzado los 2,1 y 2,3 grados, respectivamente

Hubo un tiempo que acaparaban las portadas de los periódicos e informativos de radio y televisión. Lejos queda ya la serie sísmica de Jódar-Peal de Becerro, por ejemplo. Solo en 2018 se contabilizaron 653 temblores, que continuaron durante todo el año siguiente. Treinta alcanzaron o superaron la magnitud 3.0 grados y tres la de 4.0. La energía total liberada por la serie durante durante ese periodo fue la equivalente a un terremoto de magnitud aproximadamente igual a 4.6. 

A pesar de que no son noticia, lo cierto es que la provincia de Jaén sigue registrando movimientos imperceptibles al ser humano. Así lo reflejan los datos publicados por el Instituto Geográfico Nacional y consultados por este periódico. En los últimos treinta días se han contabilizado una docena de temblores en el mar de olivos.

Los microterremotos de mayor magnitud se han dado en Lopera y Peal de Becerro, donde se han alcanzado los 2,1 y 2,3 grados, respectivamente. Los dos últimos temblores, de acuerdo con las mismas fuentes, se han detectado en Fuerte del Rey, con una magnitud de 1,5 cada uno. Se detectaron el Jueves y Viernes Santo.

Recordar que la Universidad de Jaén cuenta con un sismógrafo de banda ancha, que se encuentra funcionando en periodo de pruebas, y que ha sido subvencionado e instalado por el grupo de investigación Riesgo Sísmico y Microzonificación de la UJA, corriendo la infraestructura necesaria a cargo del Vicerrectorado de Infraestructuras y Desarrollo de Campus. Su mantenimiento corre a cargo del profesor, y miembro de dicho grupo de investigación, José A. Peláez, profesor perteneciente al Área de Física de la Tierra y miembro de la Sección de Sismología y Física del Interior de la Tierra de la Comisión Española de Geodesia y Geofísica.