Tatiana Morcillo Llévenes, bailarina y empresaria
La artista se estrena en el ámbito emprendedor con una empresa dedicada a grandes eventos y mantiene el vínculo con el mundo del espectáculo
Tatiana Morcillo Llévenes (Andújar, 1984) formó parte de aquella primera generación de Fama, A Bailar! que tuvo tal respaldo de audiencia que los participantes hicieron una gira por España; los adolescentes (y no tan adolescentes) imitaban la forma de vestir de Tatiana y cía, y una parte de la danza tuvo más visibilidad que nunca en televisión. La iliturgitana fue semifinalista, y desde ahí labró un camino en el mundo del espectáculo que aún continúa. El paso del tiempo ha propiciado que la bailarina también se haya convertido en empresaria. Su marca es Llévenes Wedding & Event Planner, destinada a grandes eventos como bodas.
"Ya llevo dos años", señala a este periódico acerca del periplo como autónoma. Su discurso es el de cualquiera que emprende: todo es muy duro, aunque cualquier paso hacia adelante tiene el sabor de las grandes victorias. Afincada en Madrid, Morcillo Llévenes también hace trabajos en Granada. "Aquí empecé de cero. Yo no era nadie en lo nupcial. He tenido que hacerme un hueco", expresa. El "bebé", la empresa, está creciendo poco a poco.
La vida de la iliturgitana cambió con 22 años, cuando decidió presentarse al casting de Fama, en Sevilla. Ella bailaba desde siempre, y había recibido clases de clásico. Entonces estudiaba el último curso de Ciencias y Tecnologías de los Alimentos en Córdoba. Se fue a la capital hispalense a probar suerte. Y la aventura mutó en triunfo: pasó todas las fases y entró al programa.
DEL CASTING A TRABAJAR CON ESTRELLAS
Dentro, ya con el concurso en marcha, cada semana tenía el mismo presentimiento: sería expulsada. Quizá solo era un juego mental, porque se plantó en semifinales, y más tarde regresó al formato de parejas del talent. Llegó la gira conjunta, y después en solitario, Tatiana Morcillo Llévenes trabajó con Lola González, estudió interpretación y puntualmente siguió con las clases de danza.
Elsa Pataky, María Valverde, David Bisbal, David Civera y Carlos Baute son algunas de las estrellas del cine y de la canción con las que ha trabajado. A la primera la convirtió en una vocalista de rock con el spot Women´s secret; con Bisbal y Valverde coincidió en el anuncio de Freixenet de 2014; con Baute hizo gira, y acaba de bailar en Mundo diverso, el último videoclip de Civera.
La treintañera ha tenido oportunidades para conocer cómo funciona la industria de la televisión, desde la faceta de bailarina hasta como presentadora en formatos como ¡Sí, quiero! y Fuera de carta. Vuelve menos de lo que le gustaría a Andújar, y reconoce que todavía recuerda la primera vez que subió en carreta hasta el Santuario. Más allá de la creencia personal, reivindica la importancia de la cita para el municipio. Ella, ya en 'modo empresaria', advierte de que todavía tiene margen de mejora; aún puede ser una inyección económica más notable y respetuosa con el medioambiente. "Mi alma necesita todavía subirse a un escenario", admite. Lo consigue en ocasiones. Aun cuando la empresa roba horas y horas, la magia sigue ahí.
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