La campeona de España de tenis de mesa se hace mayor
Isabel Conchillo, jugadora de tenis de mesa campeona de España el curso pasado en benjamín, estrena categoría alevín en los campeonatos
Cuenta Antonio Conchillo que su hija Isabel Conchillo (Linares, 2008) tiene un apetito voraz para los deportes. No en vano, el curso pasado fue campeona de España de tenis de mesa —por equipos y por dobles— en la competición disputada en Tarragona. Ahora estrena categoría alevín y mañana compite en la Liga de Primera Nacional Femenina en Fuengirola, tras haber iniciado la liga masculina.
El triunfo en tierras catalanas, con la granadina Julia Martín de pareja de dobles, sorprendió a todos. "Es increíble que sólo perdiese un partido", recuerda Almudena Roldán, directora técnica del Tecnigen de Linares, club donde milita Conchillo desde hace cuatro años.
Enrique Conchillo, hermano de Isabel, empezó antes que ella jugando al tenis de mesa. Un día, Isabel se acercó a verlo entrenar. "Vio que había niñas, le gustó y terminó apuntándose al Tecnigen", recuerda el padre en conversación con este periódico. La pequeña no ha parado desde entonces: entrena casi todos los días en el Polideportivo San José desde las 18:30 hasta las 21:00 horas. "A veces, si no tiene deberes, se viene antes y me ayuda mucho en los entrenamientos con el resto", aporta Roldán.
"LO TIENE TODO PARA SER UNA BUENA JUGADORA"
La directora técnica del Tecnigen de Linares asegura que ha visto pocos casos de "talento" tan evidente como el de Isabel Conchillo. En casa intentan que esté tranquila, que cumpla con los libros y que sepa administrar el tiempo. Ella ha aprendido a elegir entre todas las prácticas deportivas que le gustan e incluso dejó el conservatorio por falta de tiempo.
Isabel Conchillo ya ha competido con las selecciones andaluza y nacional. "Es muy persevante, y lo tiene todo para ser una buena jugadora", señala Roldán, quien la ve incluso con proyección en el ámbito europeo. Antonio Conchillo dice que han evitado comprar a la niña instalacoines de tenis de mesa en casa. "Es mejor que entrene en el club, que cuida mucho a la cantera y es fantástico. Es ahí donde debe progresar", concluye el padre.
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