Todos miran a Pablo Sánchez

El base linarense, todo un prodigio del baloncesto, es convocado por la selección sub 15 para participar en el Trofeo de la Amistad de Grecia

Cuando Ricky Rubio anotó una canasta estratosférica desde el centro de la cancha para forzar la prórroga contra Rusia, en la final del Campeonato de Europa cadete -que ganaría España (106-110)-, tenía más o menos la misma edad que Pablo Sánchez, el base linarense que ha echado los dientes en el pabellón donde el actual jugador de Utah Jazz de la NBA comenzó a forjar su leyenda. Su padre, Carlos Sánchez, jugaba en el CB Linares y no era extraño verlo corretear por las gradas con una pelota en las manos. Pronto se vio que el pequeño Pablo tenía madera de jugador. Lo llevaba en los genes, porque su madre, María del Mar Infantes, también fue una de las grandes del CB Santana, cuando Linares era toda una referencia en el baloncesto femenino,

El niño prodigio del basket linarense acaba de ser convocado por la selección sub 15 para participar en un torneo internacional en Grecia. Se lo ha ganado a pulso. Ha cuajado una temporada espectacular con su club, el Unicaja de Málaga, a donde llegó, el pasado verano, después de deslumbrar al mundo en el Campeonato de España infantil. Fue nombrado MVP del torneo que acabó en sexta posición el Campeonato de España, con unos números sobresalientes: 26 puntos, 15,1 rebotes y 2,8 asistencias por partido, con un 38,2 de valoración. Uno de sus mejores partidos fue precisamente contra el Unicaja, por el quinto y el sexto puesto, en el que logró 23 puntos y 15 rebotes, para una valoración final de 36.

Lo curioso del caso es que fue elegido el mejor jugador del campeonato con el CAB Linares, un club humilde y poco acostumbrado a codearse con las mejores canteras del país en baloncesto masculino. Pero con Pablo Sánchez todo es posible. También ayuda un físico portentoso, pese a su edad, y, sobre todo, su versatilidad, puede jugar en todas las posiciones del perímetro gracias a sus buenos fundamentos técnicos y capacidad de liderazgo. Criado en la cantera del CB Linares, como su padre, sigue los pasos de otro grande y siempre recordado del baloncesto linarense, el malogrado Juanfra Garrido, a quien todavía hoy se recuerda por su paso por el Estudiantes, el Caja San Fernando o el Breogan de Lugo.