Tres detenidos más por la brutal paliza a un joven magrebí

Ascienden a seis los arrestados por su presunta implicación en la agresión al inmigrante para vengar un robo. El operativo sigue abierto y no se descartan nuevas detenciones

Ya son seis los detenidos como presuntos autores de una "brutal paliza" propinada a un joven magrebí al que confundieron, al parecer, con el delincuente que había atracado previamente a un vecino. El agredido, sin embargo, no tenía relación alguna con el robo. Fuentes de la Comisaría Provincial de la Policía Nacional confirman a este periódico que el operativo sigue abierto, por lo que no se descartan nuevas detenciones, si bien reconocen que no está siendo nada fácil su identificación puesto que en el momento de los hechos iban "enmascarados".

Las pesquisas comenzaron a primeros del presente mes cuando los investigadores tuvieron conocimiento de una salvaje agresión recibida por magrebíes que pernoctaban en una guardería en construcción de una zona de Jaén. Las víctimas, una vez identificadas, mostraron reticencias a los agentes para desvelar lo ocurrido la noche del día 1 de noviembre cuando se encontraban en una obra pernoctando, "presas de un gran miedo y desconfianza al tratarse de unos extranjeros". No obstante, consiguieron su confianza y con su ayuda lograron identificar a los supuestos agresores con grandes dificultades en la investigación, deteniendo, en un primer momento, a tres de los integrantes incluido su cabecilla.

UN ROBO A UN ANCIANO MOTIVÓ EL ATAQUE A LOS MAGREBÍES

El origen de la paliza se produjo tras personarse un anciano en la Comisaría para denunciar que había sido víctima de un robo y una agresión por parte de dos jóvenes, al parecer, magrebíes. De manera paralela, un grupo de vecinos del barrio en el que sucedieron los hechos fueron citados vía WhatsApp por uno de los arrestados a un lugar determinado para "vengar" a la víctima del atraco. Enmascarados y armados con palos y armas blancas, los miembros de este grupo golpearon brutalmente a uno de los jóvenes que pernoctaba en el edificio en construcción. Los otros dos salieron huyendo nada más ser sorprendidos al grito de "fuera moros".

La Policía Nacional relacionó los hechos con la denuncia realizada días antes por un anciano, quien relató que, mientras paseaba por el barrio, un joven le pidió un cigarrillo. Cuando le respondió que él no fumaba, le arrojó al suelo. Indefenso, le arrebataron por la fuerza una cadena de oro que llevaba en el cuello y su bastón, con él le golpearon en repetidas ocasiones antes de darse a la fuga. La Policía considera que este hecho delictivo ha sido el desencadenante de la represalia que acabó con la "venganza" contra el grupo de jóvenes magrebíes que no habían sido los autores del presunto robo por el que fue detenido un joven.