El universo musical de María del Mar Jurado

La violinista carolinense de solo 15 años deslumbra con la Orquesta Sinfónica Camerata Musicalis en el Teatro Nuevo Apolo de Madrid

María del Mar Jurado Jiménez tardará mucho tiempo en olvidar lo vivido este domingo sobre las tablas del Teatro Nuevo Apolo de Madrid. Su sonrisa lo decía todo. Estaba feliz y entusiasmada. No solo se metió al público en el bolsillo, sino también a sus compañeros de la Orquesta Sinfónica Camerata Musicalis. A sus 15 años, es todo un prodigio del violín. Es elegancia, exquisitez y vaporosidad. Más de 15 minutos de ovación para uno de los grandes fenómenos de la música clásica española.

A primera vista, María del Mar Jurado parece una adolescente normal. Sin embargo, nada en esta joven carolinense es ordinario. Ni su currículum, ni su talento, ni sus enormes ganas por abrirse camino como concertista.

Y así lo demostró con el concierto para violín número 1, de Max Bruch, que ofreció junto con la Orquesta Sinfónica Camerata Misicalis y en el que estuvo simplemente sublime. El envite no era nada sencillo, pero ella lo resolvió con "una grandísima sensibilidad musical y carisma, ejecutando un programa y un bis extraordinarios", señalan desde la orquesta.

"Cada uno de sus movimientos son excelentes, en especial el segundo, que es una joya, un Adagio que es capaz de conmover a cualquiera", añade la joven intérprete a la revista especializada codalario.com. Fue la oportunidad soñada para cualquier solista que ella se lo ha ganado a pulso. Estudiante del Conservatorio Profesional de Música Andrés Segovia de Linares, María del Mar Jurado rezuma talento pero también esfuerzo y dedicación. Muchas horas de estudio y ensayo para conseguir un elevado nivel técnico que le permite solventar con soltura cualquier adversidad.

¿POR QUÉ ES ESPECIAL?

La violinista carolinense participó en el proyecto de Camerata Misicalis '¿Por qué es especial?'. Un novedoso espectáculo de la orquesta que tiene por objetivo acercar la música clásica a nuevos públicos mediante un transgresor formato que combina diversión, conocimientos y cultura. El público, además de disfrutar de la mejor música clásica, sale del auditorio con una sonrisa en la cara y con las claves que le habrán permitido entender y apreciar la sinfonía que acaba de escuchar. Y María del Mar cumplió con creces ese cometido.

"María del Mar Jurado es un claro ejemplo de trabajo, de ilusión y de esfuerzo, que lo tiene todo en sus manos para poder triunfar en este difícil mundo de la música clásica", asegura el director de Camerata Misicalis, Edgar Martín.

PREMIOS Y MÁS PREMIOS

Con tan solo 15 años, la artista carolinense ostenta un palmarés envidiable, que incluye el primer premio del Concurso de Música de Cámara Visitación Magarzo 2015, como integrante del Trío de cuerda M, y el de Jóvenes Intérpretes de Jaén 2016; el segundo premio del Concurso de Música de Cámara Lorenzo Palomo, celebrado en Pozoblanco (Córdoba), como componente de dúo de violín-viola; o el primer premio y premio especial a la mejor intérprete de cuerda en el XVI Certamen Nacional de Intercentros Melómano en 2017.

Asimismo, ha colaborado con la Orquesta Castulum de Linares en distintos conciertos, entre ellos el de Año Nuevo de 2017, celebrado en el Teatro Cervantes. En mayo de ese mismo año participó en un taller de orquesta bajo la batuta de la prestigiosa directora linarense Lucía Marín, interpretando como solista obras de alto nivel. Como es lógico, en el conservatorio están tremendamente orgullosos de la progresión de María del Mar Jurado, a la que le espera un futuro de lo más prometedor.