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"Tenemos un médico por cada 316 habitantes; a la cola de Andalucía"

Por Esperanza Calzado - Mayo 02, 2021
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Nacido en Motril (Granada), casado y padre de dos hijos, es licenciado y doctor en Medicina por la Universidad de Granada y médico especialista en Neumología. Desde noviembre de 2000 es neumólogo en el Complejo Hospitalario de Jaén y desde enero de 2020 el Jefe de Servicio de Neumología del Hospital Universitario. Gerardo Pérez Chica sucede a Emilio García de la Torre al frente de la presidencia del Colegio de Médicos de Jaén y nos abre las puertas de la institución en esta entrevista en profundidad en la que no solo hablamos de coronavirus, sino de la situación de la profesión y de su implicación social, porque integrar a la ciudadanía en el Colegio, a todos los grupos de pacientes, es uno de los grandes retos de la flamante junta de gobierno. 

Jaén está a la cola, con la peor relación entre el número de médicos por habitantes de Andalucía. Por eso, Gerardo Pérez llamará a cuantas puertas hagan falta para atraer talento a la provincia. Porque no es por falta de contratos sino porque no hay médicos en las bolsas de empleo. ¿Cómo puede ayudar el Grado de Medicina y la Ciudad Sanitaria? Hablamos de esto y mucho más.

—¿Cómo están siendo las primeras semanas en el cargo? ¿Tuvo claro desde el principio que quería ser presidente de la institución colegial?

—La verdad es que yo ya estaba dentro de la casa, porque hasta el mes de enero pasado era el vicepresidente, un puesto que he ocupado durante cuatro años. Cuando el doctor Emilio García de la Torre decidió no continuar, el grupo de colegiados que estábamos dentro de la junta directiva mostramos un gran consenso, más otras incorporaciones, y decidimos que yo era la persona que tenía que ocupar la presidencia.

—No sé si a ustedes les pasó lo mismo que a los periodistas... Cuando Emilio García de la Torre dijo que dejaba la presidencia no nos lo acabamos de creer, nos sorprendió mucho.

—El año 2020 fue especialmente duro, pero ya antes de que comenzara la pandemia él había expresado que era su última legislatura. Al principio no lo creíamos y se lo preguntamos varias veces. Emilio García de la Torre es una persona entrañable, que siente como nadie el Colegio de Médicos y que ha vivido el mundo de la colegiación de los últimos 35 años. Había que respetar su decisión de dejar el cargo y ha cubierto un ciclo de forma brillantísima. Y si le llegó el momento de descansar, hay que respetar su decisión.

—¿Qué le dice su familia cuando comunica que se va a presentar a las elecciones? Afronta un mandato muy complicado, con el fin de la pandemia, cuando los aplausos ya han quedado atrás.

—Esto es voluntario. Seguimos en pandemia y es importante recordárselo a la población. En casa respetaron mi decisión y me animaron. Además, mi mujer es médico también, por lo que cuento con un apoyo inestimable. Mis hijos lo entendieron, porque son muchos años dedicados al mundo de la medicina. A veces la ciudadanía dice que los sanitarios estamos hechos de otra pasta y, en este caso, creo que hemos estado a la altura de lo que la gente quería y esperaba de nosotros. Aparte del vértigo de las primeras semanas y el orgullo de coger el reto sin saber que íbamos a ser la única candidatura, sí tuvimos esa sensación. El hecho de ser los únicos nos llenó de satisfacción a toda la junta directiva porque creo que representamos, de una forma variada, todas las sensibilidades del médico de la provincia, y eso es bueno, que todo el mundo se vea reflejado.

 Presidente del Colegio de Médicos de Jaén. Foto: Andrés García
 Presidente del Colegio de Médicos de Jaén. Foto: Andrés García

UN COLEGIO DE MÉDICOS A PIE DE CALLE

—¿Qué retos se marca? ¿Será una junta de gobierno de cambios o de continuidad?

—Cierta continuidad sí que habrá porque nueve médicos que estábamos con el doctor García de la Torre hemos continuado, pero hay seis personas que han entrado en la nueva junta directiva. Pensamos que hay que dar un paso adelante porque la sociedad no es la misma que la de hace unos años y deben haber cambios para que la ciudadanía sienta que el colegio de la provincia está con ellos y atiende sus peticiones. Debemos integrar a la ciudadanía en el Colegio, a todos los grupos de pacientes. Es nuestro reto.

—Hemos visto que ya se han tenido las primeras reuniones para alcanzar este objetivo.

—Efectivamente. Hemos tenido ya algunas reuniones con grupos de pacientes y vamos a seguir teniéndolas. Pero no es el único reto. Nos debemos a nuestros colegiados y a los médicos de la provincia de Jaén, por lo que queremos que el Colegio no sea un edificio físico sino que lo sientan como suyo.

—Como diríamos en Lacontradejaén, van a estar más a pie de calle...

—Sí, sí, sí... Es una buena definición y así lo estamos haciendo. Los profesionales que formamos la junta directiva sentimos el día a día de la Medicina y no somos ajenos a lo que está pasando, porque no somos médicos de despacho. Hasta ahora hemos tenido un retorno muy positivo y estamos notando esa presencia. Otro reto importante es seguir mejorando, aunque se había empezado en la legislatura anterior, la formación. La formación acreditada y de calidad es fundamental y esa es una de las apuestas claras y decididas para los próximos cuatro años. Porque es lo que la ciudadanía espera de nosotros, que seamos médicos preparados, acreditados, con calidad y formación.

UN AÑO DESPUÉS DEL INICIO DE LA PANDEMIA

—¿Cómo están los médicos un año después del inicio de la pandemia?

—El año es duro, y digo es porque no ha acabado. Esta pregunta me la han hecho varias veces y el año es duro no sólo desde el punto de vista físico, que lo está siendo, sino desde el psicológico. La carga emocional a la que nos está sometiendo el Covid-19 a nosotros, y al conjunto de la población, es dura e intensa. Yo soy neumólogo pero en nuestra junta directiva tenemos médicos de familia, intensivistas y profesionales de mucha índole y hemos visto que desde el centro de salud más lejano hasta las Urgencias, las UCIs, las plantas -que han sido plantas Covid en gran parte del año y es bueno que la ciudadanía lo sepa- no hemos podido prácticamente dedicarnos a otra cosa y seguimos haciéndolo.

Estamos en la cuarta ola y es verdad que los números empiezan a acompañarnos, pero todavía seguimos con muchos pacientes ingresados, aparte de atenderlos en el centro de salud. Todo esto nos ha sometido a un castigo importante en lo físico y en lo emocional. Son muchas sensaciones al ver al paciente solo en un momento difícil y saber que somos su referente emocional porque las familias no pueden acompañarlos. Eso nos somete a un estrés adicional. Pero seguimos con ilusión porque ahora sí que vemos esa luz, que es la vacunación. Pero debemos seguir, también, con la vacuna de la responsabilidad.

Foto: Andrés García
Foto: Andrés García

—Cuando se dan esos mensajes optimistas, la población tiende a relajarse. ¿Hemos sido los periodistas demasiado alarmistas para que la gente no se relajara?

—Hay que dejar siempre una ventana a la que salir y por la que pueda entrar el sol. Eso también es bueno decírselo a la población, pero con cautela y con prudencia. En el Colegio cambiamos, desde hace un año, la forma de aproximarnos a la gente y aparecemos a diario en los medios de comunicación porque queremos enviar mensajes muy dirigidos a la ciudadanía, persistentes y reiterados. Bajo esa responsabilidad y prudencia hemos de intentar lanzar los mensajes.

La distancia física entre las personas, mantener una buena higiene y las mascarillas significaron un cambio de ritmo. Hoy hay países en el mundo que están viviendo con absoluto dramatismo la pandemia, por lo que no podemos relajarnos porque no podemos dar un paso atrás. Aprovecho para hacer un homenaje a todos los profesionales que ya no están con nosotros, que es muy duro, y a toda la población porque es ya raro que haya una casa que no haya tenido contacto con el coronavirus o un fallecido. Vaya por delante mi reconocimiento a todos ellos.

DÉFICIT DE MÉDICOS Y MEDIDAS DE FUTURO

— ¿Cómo llegamos a la pandemia y cómo salimos en cuanto al sistema sanitario? Era evidente que no disponíamos de medios, nadie se esperaba algo así, pero en el caso de Jaén, la plantilla sanitaria ya era deficitaria antes.

—Esa pregunta merece una reflexión detenida porque tiene diferentes lecturas. En primer lugar, nadie en el mundo estaba preparado para un desastre de esta magnitud y no ha habido servicio de salud en el mundo que no se haya resentido. ¿Estábamos preparados a nivel mundial? Evidentemente, con este impacto, no. Nadie está preparado para el choque inicial del tsunami. A partir de ahí, empezamos a reconstruir.

Pero no todo el mundo estaba igual, y voy a la segunda parte de la pregunta que me ha planteado. Si a nivel nacional había una ratio desproporcionada en cuanto al número de médicos e infraestructuras, la reconstrucción es mucho más lenta, porque éramos menos. Si me vengo a la provincia, los datos son más preocupantes y que hay analizarlos con cierta prudencia y reflexionar cómo mejorarlos. Dispongo de los datos de la demografía médica publicados recientemente por el Consejo Andaluz de Colegios de Médicos. En Jaén tenemos un médico por cada 316 habitantes.

—¿Nuestro lector se preguntará si eso es mucho o poco?

—Vamos a compararnos con nuestros iguales. En la comunidad autónoma andaluza existe un médico por cada 234 habitantes. Si uno se compara con una población limítrofe como es Granada, existe un médico por cada 198 habitantes. Nos preocupa que estamos en la cola con la peor relación entre el número de médicos por habitantes de Andalucía y por eso debemos tocar todas las puertas para atraer talento a Jaén. No es por falta de contratos sino porque no hay médicos en las bolsas de empleo. No es por falta de dinero.

 Esperanza Calzado conversa con Gerardo Pérez tras la entrevista. Foto: Andrés García
Esperanza Calzado conversa con Gerardo Pérez tras la entrevista. Foto: Andrés García

—Entiendo que reciben con muy buen agrado la implantación del Grado de Medicina.

—Evidentemente y así lo dijimos desde el minuto cero. En cuanto el rector de la Universidad de Jaén dio esa magnífica noticia era el momento de estar a su lado. Si tenemos la cantera en casa es mucho más fácil porque puedes crear raíces. Pero para eso hay que darle unas perspectivas laborales y me refiero a la brecha tecnológica.

—El ciudadano puede pensar que la brecha tecnológica no es un problema en este sector.

—Existe. Se puede dotar a un centro de salud o a un hospital con distintos tipos de tecnología o puede pasar que, simplemente, no la haya. Eso es importante tenerlo en cuenta. Tenemos una promesa encima de la mesa y yo mismo he trabajado en ese desarrollo del Plan Funcional y en la que será la Ciudad Sanitaria de nuestra provincia. Demos seguir trabajando para que no caiga en el olvido.

—Los jienenses somos ya muy escépticos con las promesas y queremos hechos.

—Recuerdo que en nuestro programa electoral del año 2017 lo pusimos como la reivindicación número uno. Ahora está la promesa encima de la mesa y me consta que se están dando pasos pero seguimos trabajando para que se produzca. Le recordaremos a las diferentes instituciones que este proyecto no caiga en saco roto. Además, puede darse la casualidad de que empiecen a acabar los primeros graduados de Medicina en Jaén para cuando la Ciudad Sanitaria esté concluida.

—¿Podríamos decir que en un horizonte de entre diez o doce años la ratio se daría la vuelta?

—Esa ratio de médico por habitante hay que trabajarla de forma dura en esta década. No hemos hablado de la brecha económica y la gente necesita llegar a final de mes. No se puede consentir que el médico en Jaén cobre menos que en Murcia o Ciudad Real. Eso desalienta a que vengan sanitarios. Nosotros queremos que a igual trabajo, igual salario e igual tecnología en nuestros hospitales y centros de salud.

—Al igual que han sido objeto de aplausos, también han recibido la ira de la población durante esta pandemia, con casos de hasta agresiones físicas. La gente no entendía por qué no eran atendidos en su centro de salud y muchas veces no se han puesto en su lugar.

—Le agradezco esa pregunta de todo corazón. Nuestros médicos de familia han estado desde el minuto cero en el centro de salud. Pero han sido diferentes motivos los que han determinado que tengan unas pautas de actuación que no podían ser en condiciones normales, al igual que ha ocurrido en los hospitales. Ese trabajo tan gris y oscuro no ha sido reconocido por la población porque, quizás, no se ha explicado que el médico de familia estaba ahí para atender las llamadas de teléfono y para hacer de rastreador.

Uno de los problemas que hemos tenido durante las diferentes olas es que hemos tenido una ratio de rastreadores baja, no sólo en Andalucía sino en todo el Estado. Posiblemente en la ola dos, cuando nos relajamos el verano pasado después de que el presidente del Gobierno dijera que habíamos vencido al virus, la red de rastreadores no era lo suficientemente potente como para haber evitado lo que pasó después. Y eso hay que aprenderlo ahora. Cuando desescalemos, lo que tendremos que potenciar es la red de rastreadores, los test de diagnóstico rápido y, por supuesto, vacunar, vacunar y vacunar. Sólo así seremos capaces de recuperar la antigua normalidad mucho antes.

Foto: Andrés García
Foto: Andrés García

AFIRMACIONISTAS Y NEGACIONISTAS

—¿Qué mensaje le lanza a aquellos que no se quieren vacunar con AstraZeneca después de tantas noticias negativas?

—Como los medios pongan tanto énfasis en otras medicinas nos vamos a quedar sin la mitad de los medicamentos.

—¿Hemos exagerado?

—Se han producido los problemas que se han dado pero si repites la misma noticia 'n' veces en toda la prensa internacional, evidentemente causa efecto. Nosotros nos hemos declarado de forma abierta afirmacionistas en la vacunación, sea cual sea la vacuna, la que te toque. Esta pregunta que usted me realiza es la que más me hacen todos los días, incluso amigos cuando llego a casa. Si la Agencia Europea del Medicamento la autoriza en base a la evidencia científica nos la tenemos que poner. Por favor, cuanto antes estemos vacunados antes venceremos este problema.

—¿Llega a entender que existan científicos y profesionales de la sanidad negacionistas?

—Son pocos.

—Sí, pero los hay. Con que sea uno, me llama la atención, tengo que decírselo.

—Es cierto que algunos compañeros hacen una lectura no idónea de la evidencia, que es la que es. Cuando sale cualquier producto médico a la farmacia, las agencias reguladoras se encargan de que sea seguro. Es verdad que con la vacuna hemos tenido que aumentar por quince la velocidad. Un ejemplo: una de las vacunas más recientes en implementar ha sido la del papiloma y se tardó quince años en desarrollarse. Aquí hemos tenido que correr porque teníamos una urgencia que no teníamos con otro tipo de problema. Nuestros científicos se han remangado y ha sido una gran proeza. Cualquier producto farmacéutico tiene efectos secundarios, pero lo que hay que ver es si superan al beneficio. En este caso está claro que los beneficios superan a los problemas.

—En la recta final de la entrevista vamos a regresar a Jaén. He sido algo centralista a la hora de plantearle las preguntas y ahora quisiera saber cómo está la provincia a nivel de infraestructuras y personal. Estos días vemos a alcaldes muy preocupados por el "desmantelamiento" de la agencia sanitaria Alto Guadalquivir.

—No debemos transmitir esa sensación. Evidentemente, las zonas rurales en cualquier parte de España, no solo en Jaén, están más desfavorecidas. En cuanto a la Agencia Alto Guadalquivir es que estamos inmersos en una oposición dentro del Sistema Andaluz de Salud. Se está reconfigurando, empezando por Jaén capital, todos los servicios. Posiblemente esa sensación esté más exacerbada por eso, porque hay profesionales que se están moviendo hacia Jaén y desde Jaén hasta otros hospitales de la provincia. Yo pediría calma. Veamos primero cómo quedan todos los puestos de trabajo después de la toma de posesión de esta oposición, que comenzó antes de la pandemia, y de los traslados. Y, luego, ver realmente las necesidades de cada zona. 

 Entrevista a Gerardo Pérez, presidente del Colegio de Médicos de Jaén. Foto: Andrés García
 Entrevista a Gerardo Pérez, presidente del Colegio de Médicos de Jaén. Foto: Andrés García

—Somos tendentes a ensalzar lo malo pero, ¿en qué somos buenos los médicos de Jaén?

—La ciudadanía debe tener claro que estamos tan bien preparados como cualquier médico del resto del país. Lo que queremos es que se nos dote con la misma tecnología que en el resto del país. Es verdad que se están dando pasos pero hay que seguir trabajando. Estamos bien preparados, bien formados, podemos dar respuesta a las expectativas de la ciudadanía y siempre vamos a estar al lado de la ciudadanía.

—¿Algo que no le haya preguntado y quiera añadir, aprovechando el final de la entrevista?

—Quiero aprovechar varias cosas, ya que me lo permite. A la ciudadanía me gustaría decirles que aquí tienen su colegio, que los grupos de pacientes tienen aquí su colegio y quiero que lo tengan claro. Recordar que los referentes en marca salud es su médico. Un mensaje a nuestros políticos, a los que pido que crean en nosotros. Somos unos abnegados cumplidores de nuestra profesión y que nos escuchen porque siempre vamos a trabajar de su mano con honestidad y sinceridad. Que escuchen nuestras reivindicaciones porque podemos aportar algo que, a veces, en el despacho se puede perder. Por último, un mensaje a mis compañeros, a los médicos. El Colegio lo tienen abierto para cualquier necesidad, somos de los vuestros, luchamos igual que los 2.500 médicos de la provincia de Jaén. Así que mano abierta a nuestros ciudadanos, a nuestros políticos y a nuestros compañeros.

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